En busca de ser una “sorpresa” para el turismo y ya no una “ciudad inerte”
◎ La Estrategia Turística busca situar a Huesca como destino de interior para escapadas ◎ El Ayuntamiento pide la implicación de todos los agentes y apunta a cinco tipos de turistas
HUESCA.- Bajo el lema “Huesca te sorprenderá”, la capital altoaragonesa pretende dejar de ser “una ciudad inerte” -en turismoy convertirse en el destino “sorpresa” dentro de las ciudades de interior y con una mirada especial puesta en el turismo de escapadas, de viajes de corta duración. Estos son el punto de partida y el deseado final de la Estrategia Turística que ayer presentó el equipo de gobierno ante representantes de todos los sectores implicados (hoteles, hostelería, museos, cultura, equipos deportivos...) e institucionales.
La estrategia parte de la cruda realidad de que Huesca sea una de las capitales de provincia menos visitadas de toda España y, además, con una tendencia a la baja (un 23 por ciento menos de visitas desde 2019) para, aprovechándose incluso de algunas de sus debilidades, como la falta de identidad propia turísticamente hablando o el desconocimiento de la ciudad, valerse de su potencial actual y “oculto” para crear una marca propia basada en “sorprender” al turista gracias a esa falta de conocimiento sobre su patrimonio e historia.
Loreto Bermúdez de Castro, gerente de Desarrollo del Ayuntamiento, desgranó esta Estrategia Turística que persigue un cambio “necesario” que deje atrás la falta de imagen de marca y la estrategia de Huesca como “lugar de paso” hacia el Pirineo.
De la necesidad, virtud. “La falta de marca como oportunidad”, usar ese desconocimiento turístico de la ciudad para dar a Huesca una identidad como localidad que sorprende al visitante con un posicionamiento basado en su patrimonio de todo tipo, su situación y un precio más reducido que en otros puntos turísticos, más ahora que este aspecto se mira más.
Y todo ello dirigido a cinco grandes tipos de públicos: la Huesca gastronómica, la de historia y fe, en familia, de congresos y la Huesca verde.
Hostelería, pastelería, tiendas de alimentación y eventos gastronómicos sustentarán la apuesta por la gastronomía, que es “el principal reclamo para el 82 por ciento de los turistas”.
El patrimonio “poco conocido” y que, además, “se puede contextualizar en diferentes épocas” para atraer a turistas de diferentes gustos será la gran baza en el apartado de Huesca historia y fe, basado en el turismo cultural y el de peregrinos, con “una gran difusión” este último. Todo este apartado acompañado de la restauración y mantenimiento del patrimonio actual y el aún “oculto” a las visitas.
El entramado urbano, un tamaño “ideal” y puntos por toda la ciudad son las potencialidades de Huesca para destino del turismo en familia, “un público más reacio a dejar de viajar y más sensible al gasto”, lo que da puntos a la capital altoaragonesa al tener precios más baratos que otras localidades turísticas.
Junto a las instalaciones ya existentes, también el tamaño y el precio son los dos pilares para atraer turismo de congresos.
Y Huesca, al ser “un caso casi único” dentro de las capitales de provincia al contar con naturaleza a pocos minutos de paseo, se posiciona como ciudad de turismo verde por su naturalización urbana, las rutas por las cercanías o la observación de la naturaleza.
Este plan y sus acciones, algunas de las cuales “ya han empezado”, se revisará en 2026 porque, como dijo la gerente de Desarrollo, una buena estrategia debe ser “flexible” y “adaptable”.
Por el camino, el Ayuntamiento, que se presenta como “líder” del proceso pero sin “monopoli