A PRIMERA DIVISIÓN Y CON LAS GRADAS LLENAS
El inicio de cada año suele traer cierto entusiasmo y motivación para emprender nuevos retos La ilusión del espanyolismo es que la pandemia acabe y poder celebrar el ascenso en el RCDE Stadium
El 1 de enero ya está aquí. El inicio de cada nuevo año suele traer cierto entusiasmo y motivación para emprender nuevos retos. Es el momento de marcarse nuevos propósitos para intentar mejorar nuestras vidas. El 2020 ha terminado para no volver nunca más, y con él se ha llevado un periodo de tristeza, incertidumbre, preocupación y, sobre todo, rabia. Para muchos, es la oportunidad de pasar página y encarar el futuro con más esperanza e incluso recuperar la ilusión. Y el espanyolismo espera un gran cambio en este 2021, un año especial para los pericos.
Tras dejar atrás un 2020 que nos ha marcado por la pandemia del coronavirus y que trajo un descenso a Segunda división 26 años después, el Espanyol tiene muy claro lo que debe conseguir en este nuevo año. Toda la afición y el club coinciden en que el primer objetivo para este 2021 es el ascenso. No hay otro. Sin él, nada de lo demás, me refiero a todo lo relacionado con el aspecto deportivo, tendría sentido y muchas de las otras metas marcadas serían muy difíciles de cumplir. El equipo, tras una muy buena primera vuelta, en la que también ha tenido algún que otro tropiezo inesperado, suma 42 puntos y lidera la tabla con uno de ventaja respecto al segundo clasificado, el Mallorca. Si los blanquiazules siguen así, será muy difícil que el tan ansiado ascenso se escape. Pero hay más.
El RCDE Stadium quiere rugir
El fútbol sin afición no es lo mismo. El jugador número ‘12’ debe estar en los estadios y no es sus hogares. Por eso, con la llegada de la vacuna, uno de los propósitos en los que el club trabaja es que el RCDE Stadium vuelva a rugir. Y para ello ya tienen un protocolo que cumple con todas las medidas de seguridad necesarias. El Espanyol fue de los primeros en aportar un plan a LaLiga y a la Generalitat de Catalunya para que sus socios pudieran regresar al templo perico. Jugadores y afición necesitan volver a estar juntos en Cornellà. Todos desean celebrar unidos el ansiado ascenso a final de temporada.
Un 2021 para volver a ilusionar Y para que la felicidad sea completa, el espanyolismo también sueña con retener a sus principales estrellas. Raúl de Tomás parece estar en el punto de mira del Atlético de Madrid, pero en Cornellà se remiten a los 60 millones de euros de su cláusula de rescisión, aunque no solo él despierta el interés de otros equipos. Hay más jugadores que están rindiendo a un buen nivel y habrá que estar atentos a sus futuros en este enero o a final de curso. Pero el club se hará fuerte en las posibles negociaciones. Quiere crecer y que el Espanyol no solo recupere su sitio en Primera, sino que no tarde en regresar a Europa. Pericos, ¡qué el 21 sea más especial!