Diez Minutos

Sergi Arola:

El chef, que está pasando por delicados momentos financiero­s, asegura que su gran apoyo es la mujer de la que está enamorado, Silvia Fominaya: “Ojalá algún día nuestra maravillos­a amistad sea algo más”.

- Fotos: Agencias y Ana Ruiz

“Voy trampeando y pagando mis deudas” .......

Mucho se está hablando del chef Sergi Arola y de sus problemas económicos, derivados de la ruina de su restaurant­e “Gastro”, al que tanto trabajo e ilusión puso y que tuvo que cerrar en 2016 por las deudas que acumulaba.

Además, el día siete fue al servicio de Urgencias de un hospital madrileño, con aspecto desaliñado, lo que aumentó los rumores sobre su decadencia.

El chef, que salió de casa de un amigo, donde se aloja cuando viene a Madrid, quiso aclararnos su actual situación antes del estreno del musical “Forever”, en el Teatro Nuevo Apolo de Madrid, donde fue con Silvia Fominaya y los dos hijos de ésta. -¿Cómo te encuentras? -Estoy muy sorprendid­o e indignado por lo que se ha publicado y desmiento lo que han dicho sobre mi situación. -¿Qué es lo que más te ha afectado? -Me ha afectado mucho que metan a Silvia y la critiquen. Somos muy amigos y no tenemos ningún problema entre nosotros. Yo le ayudo y ella me ayuda en lo que puede. Se la ha hecho culpable de mi situación y es un despropósi­to. Si quiebra un restaurant­e, como me pasó a mí, y nadie echa el cierre queriendo ni a conciencia, es normal que te queden una serie de problemas que yo estoy afrontando como cualquier pequeño o mediano empresario español. A mediados del decenio pasado aposté por un modelo de país que no existe y que nos lo hemos comido con patatas.

-Se dice que tienes millones en deudas. ¿Las cifras que se han publicado son ciertas?

-Por supuesto que sí. Monté un restaurant­e, que era el sueño de mi vida, en 2006, junto con la que entonces era mi mujer. Yo quería que fuese un tres estrellas y restaurant­e de referencia en Madrid y donde quería retirarme y morir. Desgraciad­amente, me he visto así.

-¿Reconoces que tienes un problema económico?

-Como cualquier persona que presenta una suspensión de pagos y que tiene que cerrar un restaurant­e. Hay un problema económico, pero también hay un problema emocional porque era el sueño de mi vida.

-¿Ése fue el detonante de que acudieras a urgencias de un hospital?

-No tuve un ataque de ansiedad como se ha dicho. Tengo 49 años, estoy haciendo un cambio de look y me estoy dejando el pelo largo. El día 7 de enero estuve hablando por teléfono con un amigo –una hora y media– cuando me sentí muy cansado, pues estuve todas las navidades trabajando. Me noté un cosquilleo en la mano izquierda y pensé que lo mejor era acercarme al hospital para salir de dudas.

-Se ha dicho que llegaste casi como si fueras un indigente.

-Era domingo por la tarde y llevaba puesto un gorro de lana e iba desaliñado porque ese día no me tocaba arreglarme la barba. Evidenteme­nte, si lo que se espera es un señor con pantalones rojos de pinzas, castellano­s, camisa rosa y americana, no soy yo la persona.

“Es un despropósi­to que hayan hecho culpable a Silvia de mi situación” “Sigo enamorado de Silvia. Sabe que estoy para lo que necesite. Ella me está apoyando”

-En cuanto a Silvia, ¿cómo estáis? -Somos muy amigos. Sigo estando enamorado de ella. Ella sabe que estoy para lo que necesite. Estos días, que están siendo complicado­s para mí, ella me está ayudando y apoyando. Tenemos una maravillos­a amistad que ojalá algún día sea algo más que eso, pero de momento hoy es sólo eso.

-¿Has pedido trabajo a través de las redes sociales?

-Es mentira. Fue una broma con los tres chefs de “Masterchef Chile”, donde yo era jurado también. Publiqué que se hiciera un clamor para que estuviéram­os los cuatro chefs otra vez juntos. Yo no digo que necesite trabajo. Yo tengo mi trabajo en Lisboa y mis bolos. Voy trampeando y pagando. -¿Dónde vives? -Vivo en Lisboa en un hotel porque así es mi contrato, pues asesoro a un restaurant­e. Cuando vengo a Madrid tengo un amigo que me deja una casa. Si al final decido montar algo en Madrid, ya volveré a tener casa. Ahora no tiene sentido.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain