Claves para conciliar el sueño
El insomnio, el trastorno del sueño más frecuente, afecta hasta a un 48% de la población. ¿Cómo podemos combatirlo?
Dormir es una función vital. Una buena higiene del s ueño f avorece el descanso nocturno, que garantiza el correcto funcionamiento del sistema nervioso. Por el contrario, la falta de sueño altera las funciones cognitivas: reduce la concentración, la capacidad de atención, produce cansancio, mal humor, irritabilidad y desánimo; además, puede aumentar el riesgo de hipertensión. El insomnio estacional afecta hasta al 48% de las personas adultas; y el insomnio crónico, a un 10%. Según Vanir.es, expertos en nutrición y salud, se distinguen dos tipos de insomnio:
-Insomnio de inicio: los problemas para dormir aparecen en los primeros 30 minutos desde que iniciamos el sueño. -Insomnio de mantenimiento: aparecen despertares nocturnos de más de 30 minutos de duración o un despertar total antes de tiempo.
¿Cómo podemos favorecer el descanso nocturno?
Mantén unas rutinas para acostarte y levantarte a la misma hora –el cuerpo se acostumbrará a estos hábitos–; evita las siestas de más de 30 minutos de duración; crea un ambiente acogedor en el dormitorio, evitando la presencia de pantallas y usar tecnología (TV, tablets o smartphones) antes de ir a dormir, ya que la exposición a la luz brillante de estos dispositivos interfiere para conciliar el sueño.