CUIDA TU SONRISA
3 Una dentadura sana y bonita es tu carta de presentación y una de tus mejores armas de seducción. Descubre cómo conseguirla. 4
Los cánones dicen que los dientes delanteros tienen que ser más largos, su color más blanco que la conjuntiva de los ojos y, con los labios en reposo, se han de ver entre 2 y 3 mm. Pero como no todas hemos nacido así, la estética dental ofrece remedios a medida para cada caso.
Si hablamos de una mala alineación, la solución es la ortodoncia. Puedes escoger desde los brackets linguales (se fijan en el interior del diente) a la técnica Invisa- lign (una férula transparente y prácticamente invisible) o los brackets tradicionales.
Cuando se trata de rejuvenecer la sonrisa porque los dientes se han gastado y amarilleado, una sesión de contoneado dental (limar e igualar las piezas) combinado con blanqueamiento ofrece resultados increíbles.
Cuando tu problema sea alguna rotura, una pieza desigual de forma, tamaño o color, la solución pasa por las carillas, que pueden ser de porcelana o composite. Con esta técnica también se pueden diseñar sonrisas completas.
Y, finalmente, si hablamos de encías prominentes, la llamada sonrisa gingival, puedes decantarte desde recortarlas o modificar su forma con láser hasta ponerte bótox para conseguir que el labio superior no suba tanto.
¡Ah! y un truco casero: potencia el blanco de tus dientes con barras de labios que contengan pigmentos azules, como los colores fucsia y berenjena.