¡ESCÁNDALO!
Cayetana era un reclamo para la prensa. A ella no le gustó verse en la portada de “Interviú” en topless. Sus veranos en Ibiza siempre fueron plasmados en las revistas del corazón, pero nunca creyó que la pillaran así.
El médico, antes de decírselo a ella, se lo comunica a la prensa. Por eso Cayetana siempre contó que se enteró de que estaba embarazada por la radio.
Los seis hijos de Cayetana son fruto de su matrimonio con el que fue albacea y jefe de la Casa de la reina Victoria Eugenia. La primera labor del joven matrimonio, él tenía 27 años y ella 21, fue rehabilitar el Palacio de Liria, donde vivirían a partir de 1956. En la fiesta de inauguración del Palacio, obra de Ventura Rodríguez, Cayetana conoció a Antonio el bailarín, a quien años más tarde tacharía de “personaje nefasto”, ya que él iba diciendo que habían sido amantes e incluso que era el padre de su cuarto hijo, Fernando.
Carlos, Alfonso, Jacobo, Fernando, Cayetano y Eugenia son los hijos del matrimonio. Antes de nacer la pequeña, Cayetana había perdido toda esperanza de tener una niña. De hecho, se quedó embarazada a los 42 años. Aunque Cayetana estuvo muy pendiente de sus hijos, también tuvo tiempo para dedicarse a la vida social. Los palacios de Liria y Dueñas se convirtieron en los centros de reuniones preferidos de la alta sociedad de nuestro país e incluso del mundo. Por allí desfilaron personalidades como los príncipes de Mónaco, Rainiero y Grace o Jackie Kennedy.
Boda con un cura
Pero la desgracia para Cayetana llega en 1972, cuando su marido fallece en Houston debido a la leucemia que padecía. A Tanuca se le cae el mundo encima. Viuda y con seis hijos, tiene que reconducir su vida y es cuando se cruza en su camino Luis Aguirre, que había abandonado el sacerdocio en 1969.
El 16 de marzo de 1978, en el palacio de Liria la duquesa de Alba se casa con el jesuita ante 120 invitados. Sus hijos no vieron con muy buenos ojos esta unión y aún hoy Cayetano y Eugenia hablan pestes de Aguirre, quien según algunos dicen fue el autor de la labor de la Fundación Alba y puso al día el catálogo de las obras de arte y literarias de la Casa.
La realidad es que Cayetana estuvo profundamente enamorada de Jesús Aguirre y cuando murió, el 11 de mayo de 2001, muchos creían que no iba a levantar cabeza. Es cuando se refugia en sus amistades más cercanas, como Curro Romero y Carmen Tello.
Y se volvió a enamorar
Nadie creía que Cayetana iba a rehacer su vida cuando apareció Alfonso Díez, un funcionario que siempre había admirado a la duquesa. Ella tenía 85 años y decidió que quería compartir lo que le quedaba de vida con Alfonso, de 60 años. Sus hijos se echaron las manos a la cabeza y, para poder casarse con él, el 5 de octubre de 2011, Cayetana tuvo que repartir su herencia en vida entre sus hijos, aunque se atribuyó el usufructo. Además, Alfonso renunció ante notario a su pensión, títulos y usufructos.