¿Te falta vitamina C?
PIEL APAGADA, CANSADA, MANCHAS… SON ALGUNOS DE LOS SÍNTOMAS DE SU AUSENCIA EN TU PIEL. TE CONTAMOS CÓMO PUEDES CONSEGUIRLA.
Es una de las mejores vitaminas para proteger la piel y el cuerpo de las agresiones ambientales y el envejecimiento, y todo gracias a sus propiedades antioxidantes y a su papel en la síntesis de colágeno. La vitamina C es un antioxidante que se encuentra en muchos alimentos y los cítricos.
Cabe destacar que nuestro cuerpo no puede producir vitamina C. Aplicarla de manera tópica es 20 veces más potente en la piel que tomarla oral, nos dice Lorena Suárez, experta en belleza de “MIMAthé”. Es importante estar alerta a las posibles señales que indican una falta de esta vitamina.
-Piel apagada y cansada: la vitamina C ayuda a neutralizar los radicales libres que provocan el estrés oxidativo, es decir que ayuda a estimular la piel para recuperar un aspecto joven, fresco y luminoso. -Pérdida de volumen: con el paso de los años la producción de colágeno disminuye y por lo tanto la piel va perdiendo volumen y firmeza. La vitamina C contribuye a estimular la producción de colágeno para retrasar esa flacidez.
-Manchas en la piel: aunque pueden deberse a numerosos factores, uno de ellos es la falta de vitamina C. Un activo que también actúa como despigmentante para darle a tu piel un tono unificado y, por lo tanto, mucho más luminoso.
-Acné y rosácea: no tienen un origen en la ausencia de esta vitamina pero sí una solución. De hecho, las personas que se aplican a menudo vitamina C no sufren estos problemas, y es que reduce el enrojecimiento de la piel al igual que los folículos pilosos que dan lugar a las rojeces. -Envejecimiento prematuro: ¿Notas que tu piel tiene más años que tú? Pues bien, la vitamina C es un gran antioxidante, de hecho, una de sus características más conocidas hoy en día es que ayuda a prevenir el envejecimiento prematuro y, por tanto, la aparición de arrugas y líneas de expresión antes de tiempo.