La solidez del PP en Álava compromete la hegemonía del PNV frente a Bildu
La
este domin‐ go no lo determinará solo la fuerza de la ola contestataria de Bildu, ni la incapacidad de Sabin Etxea de volver a encan‐ dilar a los 80.000 votantes que el año pasado se “quedaron en casa” como castigo a su ges‐ tión de la pandemia. También el PP de puede morder al PNV, especial‐ mente en Álava,
Alberto Núñez Feijóo el viejo feudo que los populares controlaron
en distintas etapas de la histo‐ ria reciente, donde más fuertes se sienten y donde los jeltza‐ les están más débiles. El obje‐ tivo de Génova es mantener los 130.000 votos de las últi‐ mas generales.
“¡Araba Extremadura da!” (“¡Á‐ lava es Extremadura!”)
entonces líder del PP vasco, celebró con este mensaje en euskera la victoria en la noche electoral de mayo de 2011. Acababan de recupe‐ rar la alcaldía de Vitoria y la Diputación en la provincia vas‐ ca más española. Basagoiti hacía referencia al voto consti‐
Basagoiti, Antonio
miles de fa‐ milias procedentes de otras re‐ giones de España que emigra‐ ron al País Vasco en el siglo pasado en busca de trabajo. Pero quince años después,
los hijos de aquellos inmigrantes votan a Bildu.
candidata al ayuntamiento, de origen zamorano, se impuso en mayo aunque le cerraron el paso. Y la coalición abertzale está disparada en las encues‐ tas y en condiciones de conso‐ lidarse como la primera fuerza en Álava. “La provincia va co‐ mo un tiro, hay un cambio so‐ ciológico de gente joven que fue a vivir allí y tenemos unos resultados con los que no ha‐ bíamos soñado nunca”, señala una fuente abertzale. Mientras tanto, el PP sobrevive arrinco‐ nado como por el PNV, con quien tiene
Esa rivalidad PPPNV marcará también el resul‐ tado final.
A esa bolsa de votantes del
se dirige con su estrategia del miedo a Bildu,
fronterizo.
Su
Rocío Vitero, “derechona” más voto centro-derecha ahora el PNV vasco su renuncia táctica a la independencia, su
discurso de orden y seguridad -como elevar las penas a los delincuentes multirreinciden‐ tes o medidas antiokupa, por ejemplo-, y su recetario econó‐ mico y fiscal, por más que sus votos permitan a Pedro Sán‐ chez subir los impuestos. Y esa asociación con Moncloa será el mensaje central del PP de en los dos últimos días de campaña, acompañado por Feijóo: "El PNV es un partido sanchista,
Javier de Andrés
que vota el modelo social de Irene Montero y el modelo eco‐ nómico de Sánchez", resumió el candidato en su entrevista con este periódico.
La batalla de Álava: por qué la provincia menos poblada de Euskadi va a decidir las elec‐ ciones
Inés P. Chávarri Salvo sorpre‐ sa, el PNV ganará en Vizcaya, y
Bildu, en Guipúzcoa, por lo que el tercer territorio servirá para desempatar. La ley electoral vasca beneficia a la provincia, que con menos habitantes tie‐ ne el mismo número de esca‐ ños
Álava es el último reducto de fuerza de los populares,
donde hace cuatro años lograron sus 6 escaños, y donde según