Corus, servicios odontológicos avanzados
Apropósito del último informe sectorial presentado por Fenin, el CEO de Corus, Juan Roma, cree que quizá no incorpora todos los datos relativos al avance del volumen de prótesis en el mercado español. En este sentido, manifiesta que “estamos viendo cómo podemos colaborar conjuntamente con ellos para tener más luz sobre este tema”. Roma explica que “los estudios de mercado que manejamos indican un claro crecimiento en los próximos años en la evolución de la digitalización de la prótesis y, especialmente, una creciente demanda en tratamientos de alto valor añadido para implantes y estética, como carillas y ortodoncia invisibles”.
Flujo 100% digital
El CEO de Corus asegura que están preparados para responder a estas necesidades. Según apunta, “se trata, no solo de ofrecer prótesis de calidad, sino soluciones integradas que incorporen servicios de valor añadido en la experiencia del paciente y que sean diferenciadoras para nuestros clientes gracias a la transformación digital”. Para conseguir este objetivo, Corus se centra en ofrecer a los clínicos el acompañamiento en el uso de las herramientas. Así, la formación es uno de sus pilares básicos; “está en nuestro ADN”, afirma Roma. Siguiendo con esta línea, quieren convertir Corus Academy en una plataforma de formación digital referente en el sector. El CEO sabe que “es un proyecto ambicioso, pero lo necesitamos para ayudar a consolidar el flujo 100% digital en el sector, que es estratégico para nuestra compañía. Sabemos cómo hacerlo y poco a poco vamos a ir consolidando esta plataforma”.
Además, en cada uno de sus servicios, como Corus Link o Corus DiFlow, aportan formación digital y ayudan a sus clientes en la consolidación de las herramientas digitales acompañándolos en su transformación. Del mismo modo, para cada nuevo producto, diseñan formaciones que van más allá de un training de producto y que incorporan contenidos clínicos específicos.
La revolución odontológica
Para reflexionar sobre el cambio de paradigma de la odontología respecto a la digitalización, Corus ha organizado Génesis, un evento que tendrá lugar en Madrid el 14 de marzo.
Para ello, contará con ponentes de referencia como el profesor Guillermo Pradíes, los doctores Miguel Stanley e Imanol Donnay o Eric Rossenberg, entre otros, que aportaran desde perspectivas diferentes del sector – universidad, industria, el paciente o la del propio clínico– la visión e inquietudes del momento en un formato dinámico como el “TED talks”. El programa se cerrará con Marc Vidal, un referente internacional de la transformación digital que, como explica el CEO de Corus, “aportará una visión global del cambio que estamos viviendo y cómo tenemos que hacer frente a este futuro incierto”. Para Roma, “los límites de este cambio no están descritos, pero sabemos que el camino que estamos trazando es el correcto. Así que tenemos que colaborar en la transformación de nuestro sector, primero acompañando a nuestros clientes en la incorporación de las herramientas digitales, al mismo tiempo que proponemos productos y servicios digitales que hacen tangibles los beneficios de la transformación digital”.
La incorporación de nuevas herramientas digitales en el campo de la odontología nos está permitiendo desarrollar nuevos protocolos que nos van a llevar a una práctica más eficiente. En este artículo vamos a presentar un caso en el cual procuramos recabar toda la información necesaria en una primera visita para realizar una prótesis monolítica de zirconio de arcada completa sobre cuatro implantes zigomáticos, realizando solo una visita para verificar que los registros que hemos tomado son correctos y una última visita para colocar nuestra restauración final de forma predecible. Vamos a presentar un protocolo totalmente digital, sin imprimir modelos, con el que nuestro laboratorio va a realizar el montaje de nuestros modelos escaneados en un articulador digital personalizando los parámetros del articulador de forma individual. Introducción
En 1973, Duret acuñó el concepto CAD-CAM (por sus siglas en inglés) para fabricar prótesis dentales usando imágenes ópticas intraorales por primera vez (1). En 1987, el Cerec 1 fue introducido por Mörmann por primera vez en el mercado, un sistema que realizaba el diseño digital y el mecanizado de incrustaciones con imágenes intraorales en una sola visita (2, 3). Desde entonces, la frecuencia de uso del CAD-CAM en odontología y ortodoncia ha ido en aumento, con el objetivo de mejorar la eficiencia y los resultados en nuestra práctica diaria. Durante mucho tiempo, la principal limitación de los escáneres intraorales ha sido relacionar con precisión las dos arcadas una vez registrados los modelos, sobre todo en el aspecto dinámico de la oclusión. Todos los escáneres actuales ofrecen funciones para relacionar los modelos en oclusión estática, de manera que luego el laboratorio puede realizar el montaje en articulador utilizando el triángulo de Bonwill con parámetros arbitrarios (4, 5). Sin embargo, este montaje puede resultar insuficiente para llegar a un diseño preciso de una prótesis que reproduzca fielmente la función oclusal de nuestros pacientes.
Si la relación interoclusal no se registra de manera precisa, a la hora de rehabilitar a nuestros pacientes nos podemos encontrar con largos tiempos de sillón para realizar grandes ajustes que nos lleven a restauraciones deficientes, con una eficiencia masticatoria disminuida o reduciendo la esperanza de vida de la prótesis.
Considerando que es fundamental en la rehabilitación protésica tratar de respetar la integridad funcional del paciente de una forma precisa, vamos a tratar de reproducir de la forma más fiable la función masticatoria en un articulador digital a través de un arco facial digital.
El objetivo de este artículo es introducir un protocolo de tres visitas para la realización de cualquier tipo de prótesis de forma predecible, evitando largos tiempos de sillón en ajustes y retoques que nos lleven a tratamientos de dudosa excelencia.
Método
Acude a la consulta una paciente con edentulismo total superior portadora de una prótesis removible superior completa y restauraciones fijas sobre dientes e implantes en la arcada inferior. Sin antecedentes ni patologías de interés, no fumadora y hábitos de higiene correctos.
Refiere dolor articular y muscular, y se encuentra incómoda y disconforme con las restauraciones removibles superiores realizadas hasta el momento. Acude para realizar una restauración fija superior que solucione sus incomodidades.
Dada la poca disponibilidad ósea maxilar, se colocan cuatro implantes zigomáticos y se realiza una prótesis inmediata provisional atornillada por el método convencional y rebasada en boca.
Tras ocho meses de fase provisional, la paciente sigue refiriendo disconformidad con la prótesis provisional a pesar de los retoques realizados. Una vez evaluado el provisional, observamos que hay una dimensión vertical disminuida, no estamos contentos con los parámetros actuales y decidimos que hay que restablecer todos los parámetros y no nos vamos a basar en el provisional a la hora de realizar la restauración definitiva.
En una primera visita se realizan todos los registros necesarios para realizar la prótesis definitiva que serán verificados posteriormente a través de un try-in y una llave de verificación.
En dicha visita se realiza una seriada fotográfica, tanto de fotografías extraorales como intraorales, para aportar información al laboratorio y realizar un diseño de sonrisa digital. La paciente también aporta fotografías antiguas para guiar la estética de la prótesis definitiva. En esta primera visita también tomamos registros intraorales con un escáner intraoral (3MEspe) para obtener los siguientes STLs: Arcada antagonista.
Arcada superior con la prótesis provisional. Relación de las dos arcadas con un jig en la dimensión vertical que queremos establecer para nuestra restauración final en posición de relación céntrica. Arcada superior sin el provisional.
Arcada superior con los scanbodys correspondientes.
Y finalmente tomamos registros dinámicos con el arco facial digital (Zebris de Amann Girrbach) con los cuales debemos registrar los movimientos de lateralidad y protrusiva de la paciente, que serán reproducidos en el ordenador de nuestro técnico de laboratorio durante el diseño digital de la prótesis.
En la fase protésica (diseño y fresado), realizada por Albert Ramírez y el laboratorio D’Acosta en Barcelona, utilizamos el software de diseño Ceramill Mind Base Exocad y Motion2, una fresadora de cinco ejes de la compañía Amann Girrbach. El protocolo de fabricación lo separamos en tres fases: diseño de TrayIn, diseño de prótesis definitiva y mecanizado final.
Comenzamos organizando en Ceramill Mind toda la información generada en nuestra primera visita:
Introducimos los archivos STL de los modelos superior e inferior, escaneados de la situación actual y escaneados de los pilares de localización ( scanbodys), además de fotografías 2D que nos aportan una información muy importante en nuestra fase de diseño anatómico:
Una vez posicionados en pantalla todos nuestros registros intraorales y fotografías, nos disponemos a organizar las anatomías dentales de biblioteca en nuestro espacio a rehabilitar y prediseñamos nuestro soporte para encía artificial:
Durante todo este proceso nos ayudamos de las fotografías 2D de nuestra paciente para poder valorar posición de nuestras piezas dentales, así como de las líneas de sonrisa, líneas medias, etc.
Posicionados nuestros dientes y diseñado el soporte para encía artificial, importamos toda esta información a nuestro articulador virtual Artex Cr para cargar la información generada durante los registros dinámicos captados con Zebris de Amann Girrbach generando, de esta manera, en la parte oclusal de nuestra rehabilitación artificial desgastes producidos por los movimientos reales de nuestra paciente en vivo.
Este proceso se realiza de una manera totalmente automática, importando con un simple “clic” los movimientos dinámicos de nuestra paciente y recortando las interferencias oclusales en movimientos dinámicos que el arco facial digital ha captado en la fase de registro en clínica.
Una vez funcionalizada nuestra prótesis, capturamos imágenes de todo nuestro montaje y diseño virtual que ayudaran a nuestro equipo clínica/laboratorio a detectar posibles fallos.
Nuestro proceso de diseño asistido y funcional, y verificado a su vez en boca a través de un try-in de PMMA, colocamos nuestra arcada superior monolítica dentro de un disco de zirconio translucido en el software CAM Match2 de Amann Girrbach para posteriormente generar el cálculo de trayectorias de herramienta de la unidad de fresado Ceramill Motion2 en el laboratorio D’Acosta Barcelona.
La restauración definitiva monolítica de zirconio es llevada a boca, donde se comprueba que el ajuste, la estética y la función son correctos.
Este es el resultado final del tratamiento realizado mediante un abordaje totalmente digital:
Movimientos de lateralidades y protrusiva respetando guía anterior y guías caninas.
Y el control al año.
Discusión
Hemos realizado una prótesis total sobre implantes en tres visitas. Necesitamos más años de control de la rehabilitación y un mayor número de casos, pero el protocolo abre una nueva vía para la realización de restauraciones totales definitivas sobre implantes de una forma digital, más eficiente, fácilmente reproducible y predecible a la espera de mayores investigaciones.
Consideramos que esta es la mejor técnica para respetar la integridad funcional del paciente, a través de la reproducción de los movimientos de lateralidades y protrusiva en un articulador virtual. Otros autores proponen el escaneado a través de un escáner óptico de los modelos articulados previamente en un articulador convencional físico (6), lo que supone tener que invertir un mayor tiempo de trabajo para realizar una técnica que no es totalmente digital. Protocolos menos extendidos definen técnicas parecidas a la propuesta en este artículo utilizando un arco facial virtual mediante software específicos y a través de escaneados faciales, pero requieren de una mayor especialización técnica para ser manejados (7). Otra propuesta interesante es la de solapar el CBCT del paciente con los escaneados intraorales para identificar puntos de referencia craneales (8); sin embargo, en algunos casos puede no estar justificado el uso del CBCT para realizar un tratamiento ortodóntico o restaurador (9).