El Córdoba, obligado a ganar en casa al Recreativo Granada
● El conjunto blanquiverde necesita volver a sumar de tres en tres para traducir en puntos las buenas sensaciones de Murcia y volver a la zona noble ● Jesús Álvaro es baja por lesión
Cuando solo faltan seis partidos para cerrar la primera fase de esta Segunda División B tan extraña que el coronavirus deparó, los aficionados del Córdoba no paran de hacer cuentas para determinar cuántos puntos necesitará su equipo para asegurar su presencia en la pelea por el play off de ascenso a Segunda División.
El paso atrás dado en los dos últimos partidos, con solo un punto de seis sumados, ha complicado de manera notable el futuro a corto plazo para el equipo de Pablo Alfaro, que arrancará esta jornada fuera de los tres primeros puestos del subgrupo B, pero que tiene también la certeza de que volverá a la zona de privilegio si consigue ganar al Recreativo Granada. Al menos de manera provisional, pues el Betis Deportivo no jugará este fin de semana al haberse aplazado su partido ante el Yeclano por los problemas de coronavirus del cuadro murciano.
Huyendo de las cábalas cuando restan seis partidos para finalizar esta primera fase, Alfaro ya marcó en la previa la línea a seguir. El técnico invitó a los suyos a pensar única y exclusivamente en el siguiente compromiso. En este caso, ese escollo es el Recreativo Granada, un filial que llega en horas bajas pero que ya complicó a los blanquiverdes en la primera vuelta, marcando el principio del fin de la breve etapa de Juan Sabas en el banquillo de El Arcángel. Ganar es la única cábala posible para el Córdoba, que necesita el respaldo de los puntos para confirmar las buenas sensaciones ofrecidas en el juego ante e UCAM Murcia. Pese a la sensación de haber perdonado a un rival directo, sumar el triunfo ante el filial devolvería a los de Alfaro a la pelea por todo.
Y en esa pugna por los tres puntos, el Recreativo Granada llega a El Arcángel con el cartel de víctima propicia. Los nazaríes no saben lo que es ganar en 2021, en el que suman ya cuatro derrotas, y andan coqueteando con la zona baja de la clasificación.
Esos números, lejos de tranquilizar al Córdoba o de desatar la confianza, deben hacer recelar al conjunto blanquiverde. En una liga tan apretada, pocos equipos estiran demasiadas semanas tanto las buenas como las malas rachas, y el equipo blanquiverde ya ha dejado muestras de su especial habilidad para rehabilitar a rivales en problemas. Le sucedió con el propio Recreativo Granada en la primera vuelta y, más recientemente, con el Yeclano Deportivo en El Arcángel.
Además, las estadísticas del presente curso hablan de que el Córdoba no ganó a ninguno de los tres filiales en la primera vuelta. Cayó ante el Sevilla Atlético, mientras que solo pudo sumar un punto ante el Recreativo Granada y el Betis Deportivo. Motivos suficientes para afrontar el duelo con la intensidad del que se juega la vida en el envite.
Para que su equipo ofrezca su mejor versión, esa que ya asomó en Murcia el pasado domingo, y buscando el respaldo del resultado, Alfaro deberá introducir cambios en su once inicial, toda vez que Jesús Álvaro es baja por lesión. Berto Espeso apunta a ocupar el carril izquierdo de una zaga en la que también se espera la vuelta de Djetei, como pareja de Bernardo en la zona central.
El técnico aragonés medita también introducir a alguno de los fichajes invernales de inicio, con Nahuel Arroyo y Moussa Sidibé como principales candidatos a tomar el puesto de Moutinho y Carlos Valverde en las bandas. Sin embargo, el propio Alfaro reconoció en la previa que, pese a las premuras de la competición, ambos necesitan algo de tiempo para alcanzar su mejor nivel físico y el ritmo de competición óptimo.
El regreso de De las Cuevas y las molestias que arrastra Javi Flores también podrían deparar una permuta en la mediapunta. Sea con unos u otros, el Córdoba se sabe obligado a ganar para volver a la pelea por el liderato del subgrupo y que sean otros los que pierdan el tiempo haciendo cuentas.