LAS ENFERMERAS DE RESIDENCIAS, TAMBIÉN CONTRA EL COVID-19
Un centenar atienden los 60 centros residenciales de mayores existentes en la provincia
Desde el inicio de la crisis sanitaria provocada por el Covid-19 las residencias de mayores han sido uno de los lugares más castigados por la pandemia, tanto por número de fallecidos como por contagiados. Residencias que, en el caso de la provincia de Córdoba, cuentan con un centenar de enfermeras y enfermeros que atienden a los 60 centros existentes actualmente en la provincia, tanto públicos como concertados y privados, según los datos de la Delegación provincial de la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, competente de estos centros sociosanitarios.
Este centenar de profesionales también ha estado en primera línea de batalla frente al Covid-19, y también ha tenido que hacer frente a situaciones duras y difíciles, como los enfermeros que prestan sus servicios en UCIs, hospitales o atención primaria.
Desde el inicio de la pandemia las residencias concentran un elevado número de fallecimientos. Los datos de principios de este año de la Junta de Andalucía señalaban que el 43% del total de fallecidos en toda la provincia se habían registrado en las residencias de mayores.
A estas cifras se suma el impacto entre los propios profesionales, multitud de ellos infectados, por lo que muchos han sentido miedo, sobre todo al inicio de la pandemia, no ya por la salud propia, sino “miedo a ser vector de transmisión de la enfermedad”, como afirman varias enfermeras, entre ellas María García, de la residencia de mayores Parque Figueroa de Córdoba. No en vano, el propio personal que trabaja en las residencias, junto a los mayores residentes y al personal sanitario de primera línea, están siendo los primeros grupos en recibir la vacuna.
Pero por encima de cifras también es relevante la importante labor que continúan desarrollado durante esta pandemia, reconocida tanto por los propios residentes, por sus familias y por la sociedad en general. Muchas de estas enfermeras coinciden en resaltar que la pandemia ha servido para que el trabajo asistencial en las residencias se reconozca, incluso dentro de la propia profesión.
Como opina Inmaculada Campos, enfermera de la residencia de mayores de Torrecampo, municipio de Los Pedroches, esta pandemia “ha servido para poner en valor el trabajo de las enfermeras de residencias, pues parece que nuestro trabajo se valora menos que las enfermeras de hospitales, como si se trabajara menos, y no es así”.
Por otro lado, desde marzo del pasado año este colectivo también tuvo que hacer frente a la falta inicial de materiales de protección y a los protocolos e instrucciones sobre el Covid-19 que cambiaban cada día. Todo ello sin contar el miedo, el estrés, las duras situaciones y los propios cambios que han vivido y siguen viviendo en su trabajo del día a día, como confirman muchas enfermeras consultadas, lo que también les ha obligado a un proceso de formación y reciclaje continuo en pro de una mejor calidad en l os cuidados de l os mayores. Cambios que han podido afrontar con un gran trabajo en equipo, como también resaltan, que les sigue permitiendo ser uno de los puntales en la batalla contra el coronavirus en las residencias.
Algunas de las 60 residencias cordobesas han estado medicalizadas durante unas semanas por parte de la Junta de Andalucía. Esta medicalización ha sido positiva, “porque todo apoyo es bienvenido”, afirman desde este colectivo, aunque el respaldo e incremento de recursos que han tenido estos centros ha sido más bien de carácter médico, no así para el ámbito de la enfermería.
Con todo, las enfermeras de residencias han demostrado una vez más su profesionalidad, no solo ofreciendo a los residentes los mejores cuidados y atención posibles, sino convirtiéndose, en muchas ocasiones, en la propia familia y en el único apoyo y consuelo que han tenido los mayores durante esta pandemia.
EN PRIMERA LÍNEA
Han tenido que hacer frente a situaciones difíciles como los enfermeros que prestan sus servicios en UC Is
María García Hernández Enfermera de la residencia de mayores Parque Figueroa de Córdoba
“Creo que las residencias eran las grandes olvidadas. Solo cuando hay problemas, la sociedad se acuerda”
Inmaculada García Gómez Enfermera de la residencia de mayores Jesús Nazareno de Córdoba
“Encontrabas a compañeras que se venían abajo, acurrucadas en los pasillos porque no podían más”
Laura Muñoz Serrano Enfermera de la residencia de mayores Hogar San Rafael de Córdoba
“Hemos aprendido una exigencia continua de formación y la importancia del trabajo en equipo”
Inmaculada Campos Campos Enfermera de la residencia de mayores municipal de Torrecampo
“Desde que comenzó la pandemia, la residencia se convirtió en un mini hospital y en una mini UCI”