Una iniciativa con ‘grado superior’ de solidaridad
● Alumnas del Galileo Galilei arrancan una campaña de recogida de ropa
En el instituto Galileo Galilei de se imparte el grado FP de Promoción de Igualdad de Género, un grado superior de la familia de los servicios socioculturales que consiste en formar a promotoras de igualdad que puedan trabajar tanto en el ámbito público como en el privado. En el primer curso, ha surgido una campaña de recogida de ropa para que la población pueda donar sus prendas que ya no usa a las personas más necesitadas.
Las alumnas de este curso se han encargado de sacar adelante esta campaña a la que muchas asociaciones se han unido. Madre coraje, Sonrisa de lunares, Cáritas Diocesana, Casa madre del redentor Acisgru y también el alumnado del propio centro, son las encargados de llevar a la práctica la iniciativa.
Laura Abad, alumna del grado, explica que este proyecto surgió por una actividad de clase de la asignatura Desarrollo Comunitario, donde la profesora les propuso llevar a cabo una campaña que tuviese el fin de ayudar a la comunidad mediante redes sociales. “Esta iniciativa, realizada con la colaboración de Programa de educación Ambiental para la comunidad educativa, tendrá cabida desde el pasado 1 de febrero hasta el día 11 del mismo mes y durante este tiempo, cualquier persona puede donar ropa en el salón de actos del centro en horario de 8:15 a 21:30”, expone la alumna.
Además, esta iniciativa se adapta a las exigencias de cada asociación, repartiendo la ropa recogida en función de la que cada una les pide a las organizadoras. Por ejemplo, Acisgru ha requerido la donación de ropa de cama, como sábanas y mantas.
De hecho, este proyecto no solo está destinado a la ayuda social, sino que trata de hacer frente a una industria textil abusiva que fabrica más de 150 millones de prendas al año mediante explotación infantil con salarios de diez euros al mes como denuncian con su cartel de promoción de la campaña.
Pese a la buena intención de esta actividad no lucrativa, el covid ha resultado ser un impedimento para llevarla a cabo. “Ha sido complicado iniciar esta recogida de ropa porque muchas de las asociaciones no querían recibir ropa debido al riesgo de contagio que esta podía conllevar”, afirma Laura Abad. Sin embargo, la recogida sigue un estricto protocolo que consiste en que la ropa llegue totalmente lavada por quien la dona y ya, una vez en el centro, es desinfectada con espray y dejada en el salón de actos entre 48 y 72 horas sin tener contacto con nadie.
Una de las claves de que este proyecto funcione es la aportación de Pilar García, tutora del ciclo . La profesora fue la encargada de promover la iniciativa entre su alumnado a finales de enero, en una primera fase en el que ellas tuvieron que hacer un análisis de la realidad donde detectaran qué asociaciones de Córdoba podrían solicitar ropa para los colectivos.
“Así, cada grupo eligió a una asociación que les hizo una entrevista para conocerlas y saber qué tipo de ropa iban a necesitar. Además, hay que destacar la asociación con Ecoescuelas, con la que hemos tratado la contaminación y los derechos sociolaborales existentes en la industria textil para que las alumnas hagan una campaña de sensibilización”, indica la tutora.
En definitiva, las alumnas de este grado superior llevan a la práctica su formación en esta recogida de ropa con el fin de promocionar una sociedad donde prime la igualdad y la solidaridad.