Fervoroso sábado cofrade con actividades de 11 hermandades
● Los Dolores celebra el rezo del vía crucis con el Cristo de la Clemencia en en San Jacinto ● También hay actos del Amor, la Estrella o la Sangre
La Cuaresma sigue su curso en Córdoba. Bajo estrictas medidas sanitarias como mandan los nuevos tiempos del covid, hasta 11 hermandades de la ciudad rindieron ayer honores a sus titulares en sus respectivos templos. Las Penas de Santiago, el Amor, la Estrella, la Sangre, el Prendimiento, el Caído, la Sentencia, el Buen Suceso, el Descendimiento, el Remedio de Ánimas y los Dolores culminarán sus cultos este intenso fin de semana cofrade.
La iglesia de San Lorenzo ha acogido desde el pasado jueves el triduo a Nuestra Señora Madre de Dios en sus Tristezas, que preside el altar para los solemnes cultos en su honor. Además, la hermandad del Remedio de Ánimas ha aprovechado este acto para bendecir la nueva peana de su titular. La cofradía del Lunes Santo ha comunicado que esta obra de arte ha sido donada por un grupo de hermanos y devotos.
Por otro lado, en la iglesia de San Jacinto de Capuchinos, la hermandad de los Dolores cerró ayer el quinario al Cristo de la Clemencia, con el que realizó el rezo del vía crucis. Este año, debido a la pandemia, se tuvo que celebrar este acto en el interior de un templo que hoy acogerá la Fiesta de Regla de la corporación del Viernes Santo. Además, al término de la misa, tendrá lugar la presentación del cartel del Viernes de Dolores, día grande para la cofradía con la visita de numerosos fieles a la Señora de Córdoba.
En este mismo sentido, la Estrella y el Caído, a los que los fieles pudieron venerar ya el pasado fin de semana, ponen el punto y final a unos intentos en la parroquia de San Fernando y la de San Cayetano. Otras cofradías como el Amor, el Descendimiento, la Sentencia, el Buen Suceso, el Prendimiento y la Sangre, que regresó al Convento del Císter, terminarán hoy domingo con sus actos a sus titulares.
Por su parte, los devotos y fieles de las corporaciones cordobesas tienen una nueva oportunidad, como ya sucedió el pasado fin de semana, de venerar imágenes como las del Buen Suceso en San Andrés, el Cristo del Amor en la iglesia de Jesús Divino Obrero del Cerro o ir a Capuchinos a rendir honores a Nuestro Padre Jesús de la Humildad y Paciencia, titular de la hermandad de la Paz, que inicia así su primer gran acto de esta Cuaresma.