Un gran paso hacia la meta
● El Adesal, sostenido por una gran Amanda Valero, doblega al líder
El Adesal dio un paso hacia la permanencia al arrancar con victoria la fase por la permanencia de la Liga Guerreras Iberdrola a su paso por Baracaldo, donde se impuso al Zuazo. El equipo de La Fuensanta sumó dos puntos gracias a un ejercicio sobrio y optimizando recursos, circunstancia que le acerca a su objetivo a seguir entre los mejores. Aun así, queda mucho camino por recorrer, si bien a las jugadoras de Rafael Moreno se les puede dar la licencia para un pequeño instante de felicidad.
Y pese a que la historia tuvo ese final feliz, lo cierto es que el arranque del partido se podría entender como dubitativo. Ni el Adesal ni el Zuazo comenzaron bien. Durante los primeros cinco minutos coleccionaron infortunios que llevaron a un raquítico 1-1 de parcial.
Lo curioso es que en el siguiente ambos cambiaron. El juego pasó de espeso a fluido e intercambiaron goles, si bien esa dinámica cambió de nuevo a la inicial al paso por el minuto 15. Con todo, esos momentos sirvieron para que se elevara la gran figura de la contienda en clave fuensantina: Amanda Valero. La portera nazarí firmó una actuación sobresaliente, ayudada en buena parte por una defensa que sabía limitar las acciones ofensivas del Zuazo.
Así, el Adesal pudo dispararse en el marcador por primera vez disfrutando de una renta de tres goles. Visto el desarrollo del duelo, todo un potosí. Pero, como acostumbraba el equipo en la primera fase, los últimos minutos de la primera parte estuvieron mal gestionados y el Zuazo apretó hasta ponerse a uno. Presentando la condición de líder del grupo, había mucho aún que decir.
Y el que más habló en esa parte del choque fue el Adesal. Encontró de nuevo a Bonazzola en plenitud, Chelaru se mostró más integrada y Gleinys resultó letal en los siete metros que fabricaba Roda. En definitiva, el Adesal hacía mejor el trabajo de Amanda Valero en la portería. Y eso que se encontró con Alba Sánchez (ya se sabe lo de la peor cuña de la misma madera) en la mayor oposición por parte de la escuadra del Zuazo.
Pero la distancia de las fuensantinas fue creciendo. Y, como ocurrió el día del Salud, a falta de diez minutos disfrutaba de cinco goles de ventaja. La diferencia es que esta vez no hubo vértigo. Se vio aplomo y temple suficiente para sumar dos puntos vitales en la lucha por la permanencia. Un trabajo serio que acabó en sonrisas. El mejor momento para decir que quiere ser equipo de la Liga Guerreras Iberdrola una temporada más.