El gran salto de Unicaja
● De 10.000 pesetas a 109.000 millones de euros ● La entidad ha ido fusionándose para crecer
La absorción de Liberbank por parte de Unicaja Banco cristaliza con el tipo de canje que se estableció en el proyecto común de fusión aprobado el pasado mes de diciembre. Los actuales accionistas de Unicaja Banco contarán con el 59,5% del capital, y los procedentes de Liberbank, el 40,5%. En virtud de esta operación, los accionistas de esta última entidad recibirán títulos ordinarias de nueva emisión de la primera, en la proporción de 1 acción de Unicaja Banco por cada 2,7705 acciones de Liberbank. La entidad comienza su singladura con una presencia en el 80% del territorio nacional. Será banco de referencia de referencia en Andalucía, Extremadura, Castilla y León, Castilla-La Mancha, Cantabria y Asturias, según informó Unicaja.
prensión sobre las medidas adoptadas en el actual contexto de restricciones por el Covid-19.
El presidente de Unicaja Banco también puso en valor el papel del sector bancario durante la pandemia, dando ser vicio a los clientes de forma presencial y a través de canales remotos, proporcionando financiación y manteniendo la función de pagos, entre otros ser vicios esenciales. En esta línea, quiso agradecer a la plantilla del banco la labor desempeñada, reconociendo su dedicación, trabajo y responsabilidad durante dicho periodo.
R. E.
Con paso firme y buena letra, Unicaja Banco sigue por el camino del crecimiento. Tras la absorción de Liberbank, la entidad financiera con sede en Málaga va camino de convertirse en una de las principales entidades financieras del país y la única andaluza junto a la caja rural Cajamar. Su modus operandi ha sido siempre el mismo: aliarse para ser cada vez mayor. Lo hizo en 1991, con Braulio Medel al frente, con la unión de cinco cajas de ahorro andaluzas –Caja de Ronda, Caja de Málaga, Caja de Antequera, Caja de Cádiz y Caja de Almería–, lo repitió en 2010 al unirse a Caja Jaén, en 2013 absorbió Ceiss y ahora se ha fusionado con Liberbank. Si a eso se le suma su salida a Bolsa en 2017, es su quinto gran salto desde su creación, que este año celebrará su trigésimo aniversario.
Nada tiene que ver la Unicaja actual con la de sus fundadores. La marquesa de Moctezuma no podría ni imaginar que aquellas 10.000 pesetas que puso de capital inicial en 1909 para crear un monte de piedad en Ronda se acabarían convirtiendo en la Caja de Ronda. Tampoco los fundadores de la Caja de Cádiz en 1884, la Caja de Antequera en 1904, la Caja de Almería en 1900 y la Caja de Málaga en 1949. Todos fueron proyectos de éxito, muy ligados a la economía local, y en 1991 se fusionaron en Unicaja para ganar dimensión, poder competir en mejores condiciones con los bancos y cajas de otras partes del país y hacer frente a re