La nueva ley de la Infancia regulará el problema de las adicciones tecnológicas
● Rubio advierte del peligro de las redes sociales y la necesidad de encontrar una familia de acogida para los menores en centros
La directora general de Infancia de la Consejería de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación de la Junta de Andalucía, Antonia Rubio, acompañada por el delegado territorial de Igualdad, Antonio López, se reunió ayer en la sede del Centro de Participación Activa Poniente de Córdoba con distintas entidades y colectivos que trabajan con menores con el objetivo de “darles a conocer los detalles del proyecto de la nueva Ley de Infancia y Adolescencia que se tramita en el Parlamento de Andalucía”.
Rubio agradeció la colaboración de quienes han colaborado en la redacción de las nuevas leyes. Al mismo tiempo, anunció que van “a seguir avanzando en su desarrollo una vez que se apruebe, ya que es importante que haya una nueva instancia que actualice a la de 1998, y sobre todo una ley que se adapte a las necesidades reales de los niños de Andalucía”.
Esas nuevas necesidades tienen que ver con las adicciones tecnológicas y la violencia digital, consideradas como “los nuevos problemas importantes en la sociedad que afectan a los menores y que no están regulados”. “Se trata de una ley de infancia transversal donde se incorporan importantes novedades en relación a las adicciones tecnológicas y las violencias digitales mediante la prevención y a través de un modelo centrado en el acogimiento familiar, donde se enfatiza el abordaje de estas nuevas adicciones y su cuidado, tanto en la formación del profesorado y como de los progenitores de los niños”, señaló Rubio.
Para la directora general, la tramitación de esta nueva ley se trata de “un reto” que no solo depende del control familiar en los menores, sino de que exista “una normativa que establezca unos límites en las redes sociales y en los peligros digitales”.
“Las nuevas tecnologías y las redes sociales van más rápido que el pensamiento reflexivo y la dificultad para adaptarse a eso debe compensarse con un texto formativo que no solo se aborde desde el ámbito personal, sino también desde los medios de comunicación y los medios audiovisuales con una normativa que proteja a los menores en este sentido, cosa que hasta ahora no está desarrollado”, precisó.
Esta nueva ley transversal, “que comenzará a regularse una vez se apruebe en el Parlamento Andaluz”, también tiene como objetivo “intervenir en menores en riesgo de exclusión psicosocial y enfocar el acogimiento residencial hacia un modelo que priorice las medidas de integración familiar para que así, todos los niños de Andalucía puedan tener una familia”.
Por ello, esta la ley procurará que “no haya menores de 13 años en los centros de protección de menores, ya que, hay más de 2.000 jóvenes en estos centros actualmente en Andalucía, de los cuales 118 están en los centros de acogida de Córdoba”.
“En Andalucía hacen falta más familias de acogida, y eso se amplia mediante la difusión y las campañas”, apuntó Rubio, que además incidió en incentivar la “atención integral por parte de todas las administraciones públicas y las entidades sociales para proteger a la infancia”.
“Una vez se apruebe esta ley de infancia, hay que regular la adicción de los menores a las tecnologías mediante las entidades sociales, de ahí esta reunión”, concluyó.