BBVA y Caixabank inician el proceso de negociación para ajustar sus plantillas
● Las dos entidades se comprometen a que las salidas sean no traumáticas y con el máximo acuerdo
BBVA España y Caixabank iniciarán entre final de esta semana y principios de la que viene el proceso de ajustes de sus plantillas, en el primer caso para reducir la estructura de costes ante la profunda transformación del sector bancario y en el segundo por la fusión con Bankia, que obliga a eliminar el excedente laboral.
Las dos entidades se han comprometido a que las salidas sean no traumáticas y lleguen a través del acuerdo con los sindicatos.
BBVA reunirá el próximo viernes a los sindicatos para empezar a negociar un despido colectivo, que afectará tanto a los servicios centrales como a la red comercial de la entidad en España y cuyo alcance está aún por definir, informaron a Efe fuentes próximas al proceso.
El banco ha trasladado en una comunicación a su plantilla que el objetivo de convocar a los sindicatos es explorar conjuntamente fórmulas que permitan minimizar el impacto en la plantilla. La entidad subraya que el sector se encuentra “en un contexto de profunda transformación marcada por una enorme presión competitiva, bajos tipos de interés, la adopción acelerada de los canales digitales por parte de los clientes y la entrada de nuevos actores digitales”.
En este contexto, argumenta, para garantizar la competitividad y la sostenibilidad del empleo a futuro, resulta “imprescindible” continuar trabajando de forma aún más decidida en reducir la estructura de costes del banco.
A finales de febrero, el diario Expansión publicó que BBVA planeaba recortar unos 3.000 empleos en España, cerca del 10% de su plantilla, dentro del plan de ajuste que el banco quería empezar a aplicar en la primera mitad del año para seguir reduciendo costes.
En el caso de Caixabank, la dirección de la entidad mantuvo ayer martes la primera toma de contacto con los sindicatos para negociar el recorte de plantilla tras la fusión con Bankia, una reestructuración que afectará a miles de empleados –podrían ser hasta 7.000–, aunque el banco no concretará su alcance hasta la próxima semana.
Ayer quedó constituida da la mesa negociadora del Expediente de Regulación de Empleo (ERE). Tanto el banco como los sindicatos han alcanzado un acuerdo unánime en la composición de la Comisión Representativa para la negociación, tanto en este periodo previo informal como en el periodo legal de consultas.
CCOO, como sindicato mayoritario en ambas entidades, tendrá cinco miembros en la mesa, que asumirán un poder de representación del 36,33%. Por detrás se sitúan SECB (FINE), con tres miembros (25,65%); UGT, con dos miembros (17,96%) y ACCAM (6,96%) SATE-CIC (5,91%) y otros (1,03%) con un miembro cada uno, respectivamente.
En este primer contacto también se ha fijado el calendario de las próximas reuniones, que se han acordado para el 20 de abril en Madrid y el 27 de abril en Barcelona. El periodo de consultas se prolongará al menos quince días y posteriormente dará paso a unas negociaciones formales que finalizarán en este segundo trimestre.