Invitado a la fiesta del título
● El Ángel Ximénez afronta el duelo más duro del curso ante un Barça que será campeón si logra el triunfo
Al Ángel Ximénez se le presenta por delante un reto muy complicado. Los de Paco Bustos tienen que vencer a un Barcelona que no ha perdido ningún partido de Liga Asobal esta temporada y que, de llevarse el duelo de esta tarde en el Palau Blaugrana ante los cordobeses (19:30), se proclamaría matemáticamente campeón, revalidando así su título.
Tras caer la pasada jornada ante el Balonmano Nava en Segovia (26-25), el Ángel Ximénez atraviesa una racha de tres derrotas consecutivas que complican mucho el sueño de los pontanos de poder entrar en puestos europeos. Con 28 puntos, el conjunto cordobés ocupa la octava plaza de liga y ya tiene asegurado el objetivo de la permanencia. Sin embargo, dar la sorpresa en tierras catalanas y vencer al Barcelona podría suponer un plus de moral para un equipo que tiene Europa a siete puntos.
Eso sí, vista la entidad del rival y el dominio que ejerce tanto en competición doméstica como en Europa, la empresa se presenta un año más como una misión al filo de lo imposible. Los catalanes, de hecho, quieren asegurar ya el título liguero para centrar sus esfuerzos en la Liga de Campeones.
Y es que, el Barcelona es líder en solitario de la Liga Asobal con 54 puntos, y sumar los dos puntos del duelo ante el conjunto cordobés les daría, a falta de siete jornadas para que termine la competición, el título de campeones. De hecho, los barceloneses no han perdido ni un solo encuentro liguero, y todos los han ganado con bastante diferencia de goles en el marcador sobre sus rivales. El último rival para el equipo de Xavi Pascual fue el último clasificado, el Cisne Balonmano, al que vencieron por 4321. Un ejemplo del potencial de un equipo con una rotación casi infinita.
En el partido de ida en el pabellón Alcalde Miguel Salas, correspondiente a la jornada 13, los de Puente Genil plantaron cara pero terminaron cayendo ante un conjunto culé muy superior durante el encuentro y que castigó la primera mala parte de los cordobeses (20-29).
Sin presión ninguna, Paco Bustos tiene la oportunidad de sacar a relucir el gran nivel que su equipo ha demostrado esta temporada ante un Barcelona todopoderoso que no tiene competidor en España. La fiesta del campeón parece servida y solo el Ángel Ximénez puede aplazarla.
Los pontanos viajaron a Barcelona desde Nava de la Asunción, donde perdieron el sábado