El Defensor critica la imprevisión en la crisis migratoria canaria
Han muerto 88 africanos camino del archipiélago en lo que va de año, uno cada 32 horas
El Defensor del Pueblo, Francisco Fernández Marugán, aseguró ayer que las administraciones “no estaban preparadas para dar una respuesta adecuada” a la crisis migratoria en Canarias que se registró después del verano de 2020 e indicó que hubo “falta de previsión” por parte de las autoridades competentes, así como “descoordinación” entre las mismas, así como “una ausencia notable” de una red de acogida.
Así lo declaró ante la Comisión Mixta de Relaciones con el
Defensor del Pueblo, ante la que compareció para presentar el informe La migración en Canarias, tras su visita, el pasado noviembre al archipiélago. Este estudio, indicó Fernández Marugán, recogió el “colapso” vivido en las islas durante los últimos meses del año pasado, que obligó a habilitar en Canarias dispositivos temporales, como hoteles, naves industriales y campamentos, para la acogida de personas migrantes.
Su comparecencia coincidió con la tragedia ocurrida el pasado lunes, cuando un helicópero del Ejército del Aire evacuó a tres inmigrantes de un cayuco en el que perecieron 17 personas. La Guardamar Talía llegó anoche al puerto de Los Cristianos, en Tenerife, remolcando la embarcación con los cadáveres. La patrullera salió del sur de Gran Canaria a primera ahora de la tarde del lunes, para afrontar una navegación de más de 600 kilómetros hasta el cayuco que tardó casi un día en cubrir.
Previamente, los únicos tres supervivientes de la barca, dos hombres y una mujer, fueron evacuados en helicóptero por el Servicio de Búsqueda y Rescate (SAR) del Ejército del Aire a Tenerife Norte, isla en la que quedaron hospitalizados.
Dos agencias de ONU informaron de que en la Ruta Canaria han muerto este año 88 inmigrantes, lo que supone que perece de promedio una persona cada 32 horas. Según el recuento del programa Inmigrantes Desaparecidos de la Organización Internacional para las Migraciones desde que comenzó el año han perdido la vida intentando llegar a Canarias en patera 88 personas, cifra que incluye a los últimos 17 cadáveres.