La hora de sacar el orgullo
● Los blanquiverdes viajan a La Línea en busca de un triunfo que, al menos, les ayude a suavizar el final de temporada ● Enfrente tendrán a un rival con urgencias por la salvación
Si algo les quema por dentro después de acumular revés tras revés, es el momento de sacar el orgullo. El Córdoba visita a la Real
Balompédica Linense apenas unos días después de sufrir el varapalo definitivo que cercenó la inmensa mayoría de sus opciones de jugar el play off de ascenso a Segunda División. Ahora, con el objetivo ya camino de ser una utopía, lo primordial para los blanquiverdes es vivir un final de temporada lo menos arisco posible. Y eso pasa por sumar los máximos puntos que se pueda.
Sin cábalas ya que valgan más allá de un milagro que casi nadie espera, Mosquera y sus jugadores tienen ante sí una buena oportunidad para lavar su imagen y salvaguardar el amor propio en la visita a una Balona hundida en la tabla y metida en serios problemas. Ganar es el único remedio para el delicado momento deportivo y social que atraviesa el CCF. Por más que ya no valga para mucho, un final de curso suavizado con algunos triunfos sería la mejor noticia.
Los linenses, por su parte, necesitan los tres puntos por la vía de la urgencia para intentar escapar de la quema ahora que el final de liga se acerca. El conjunto albinegro acumula las mismas nueve jornadas que el Córdoba sin ganar y, al igual que ha pasado en El Arcángel, su cambio de entrenador no ha resultado como se esperaba.
Por eso, el choque en el Municipal de La Línea medirá a dos equipos temerosos de volver a perder para no ver agrandadas sus heridas. En esa lucha, si el Córdoba es capaz de golpear primero, podrá utilizar una valiosa arma: la ansiedad de un rival que sabe que le va la vida en estos 90 minutos de juego.