Tres de los barrios más pobres de España se encuentran en Córdoba
Las PalmerasParque Azahara se mantiene en la sexta posición con 7.483 euros por vecino
Tres barrios de Córdoba capital aparecen un año más en la lista de los 15 más pobres de España, según la última actualización del informe Urban Audit publicado ayer por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Un dato alarmante, denunciado de manera continua por distintos colectivos vecinales y hasta reconocido por las propias instituciones, que no acaban de encontrar la fórmula para desenquistar la pobreza de esas zonas.
Una vez más, el barrio más pobre de Córdoba es el que integran Las Palmeras-Parque Azahara, con una renta media por habitante de 7.483 euros, unos 120 euros más que en el balance anterior. Apenas con cinco euros más (7.488) aparece justo después el Polígono Guadalquivir, que igualmente crece en cifras similares. Ya en el puesto 13 se sitúa el Sector Sur, por encima de los 8.000 euros (8.182), por los 8.100 de un año antes.
Un tiempo que ha permitido salir de esta estadística a Huerta de la Reina-Las Moreras (8.706 euros), que sigue así el camino emprendido en el balance anterior por HiguerónMajaneque-Alameda del Obispo (8.772). Además, hay otros seis barrios más –de los 29 en los que se divide Córdoba– que quedan por debajo de la barrera de los 10.000 euros de renta: Fuensanta-Santuario (9.102), Campo de la Verdad-Fray Albino (9.284), Villarrubia-Encinarejo (9.682), Fátima (9.704), El
Arcángel (9.764) y Alcolea (9.900).
Todos ellos quedan, por tanto, lejos de la media de la capital, que está en 11.790 euros. Una cifra que se eleva principalmente por los datos de barrios como Tejares-Molinos Altas-San Cayetano, que es el que presenta mejores datos, con 17.715 euros de renta media por vecino; Brillante-El Naranjo (17.340), Huerta de la Marquesa (16.029) y Cercadilla-Olivos Borrachos (15.728), que son los que pasan de 15.000.
Con todo, y para ver la realidad en la que se mueve Córdoba, solo hay que ver la distancia, enorme, de la que quedan estos distritos de los que presumen de contar con las rentas medias por habitante más altas de España.
Ahí, la Comunidad de Madrid copa el ranking en sus seis primeros puestos, con El Viso en la cabeza con sus 40.815 euros; le siguen Recoletos (37.067), Castellana (36.660), Piovera (36.045), Nueva España (34.317) y Almagro (33.101). La tendencia en la lista de 15 solo la rompen Barcelona, con cuatro distritos (el mejor es Les Tres Torres, con 32.958), y Vitoria, que cuela a Armentia (27.499) para cerrar la nómina.
De esta manera, el estudio, que analiza los datos de renta relativos a 2020 de los diferentes distritos de las 17 ciudades españolas de más de 250.000 habitantes, deja a Córdoba en una situación delicada, con esos tres barrios entre los que más dificultades económicas presenta. De hecho, Andalucía en general queda muy mal parada, dado que concentra diez de las 15 zonas más pobres del país.
Sevilla es la capital andaluza con peores registros, ya que acapara más de un tercio del ranking, con seis distritos, tres de ellos entre los cinco primeros. Encabeza la lista el Polígono
Sur, que es el único cuyos vecinos quedan por debajo de los 6.000 euros de renta (5.816), seguido de Los Pajaritos-Amate, con 6.043. Los otros cuatro barrios ocupan el puesto 4, 10, 11 y 12. En Málaga, la zona Rosaleda: Palma-Palmilla ocupa la novena plaza.
Las 17 ciudades analizadas son Alicante, Barcelona, Bilbao, Córdoba, Gijón, L’Hospitalet de Llobregat, Madrid, Málaga, Murcia, Palma de Mallorca, Las Palmas de Gran Canaria, Sevilla, Valencia, Valladolid, Vigo, Vitoria y Zaragoza. En total, se contemplan 523 distritos –tres menos que en la revisión anterior–, de entre los cuales la capital cordobesa posiciona tres entre los más pobres.
El Guadalquivir, en el puesto siete, y Sector Sur, en el 13, también están en el ranking
Tejares-Molinos AltasSan Cayetano es el distrito con mayor renta, con 17.715 euros
podía ser de otra manera también ha estado pasada por agua. El jovencísimo diestro de Santa Marina posó un buen rato para las cámaras demostrando ser torero.
La Policía Nacional y la Policía Local de Córdoba, por su parte, presentaron ante los medios la oficina de seguridad de la Feria de Nuestra Señora de la Salud. Se sitúa al final de la calle del Infierno, justo al lado de la Caseta Municipal. Los efectivos a pie y las patrullas en coche suman el apoyo las unidades de caballería y aérea para los operativos. “El primer fin de semana se ha desarrollado con normalidad”, aseguraron en el balance.
La Fundación Promi Rabanales escogió también el lunes para organizar su excursión antes de pararse a comer en la caseta de la Hermandad de la Vera Cruz, en la calle Tendillas. Eligen el lunes, como algunas residencias de mayores, porque “es el día más tranquilo para ir a la Feria”, reconocen. “Después iremos a bailar y, en fin, disfrutar un poco de la feria que hay algunos que solo vamos un día”, dijo un usuario.
Abundaban los paraguas en la mano, pero sin abrir. La lluvia
La Prensa organizó su recepción oficial y la Policía presentó su oficina de seguridad
amenaza, pero ahí se queda: en la amenaza. “El chubasquero por si acaso” pesa cuando vas cargando con él en la Feria y no sirve, pero mejor eso que gastarse cinco euros en uno de esos que van compactados en cuadraditos, por si llueve, y que luego te mojas igual, afirmaba una mujer que había caído en ese timo. Un algo de consuelo.
Si se comparan las previsiones que había de lluvia con lo que realmente ha llovido hasta el momento, se puede asegurar que el tiempo ya ha sido condescendiente con la Feria de este año. “Salvo las dos horas y media de diluvio que cayó el sábado, todo ha sido gloria bendita”, afirmaba la camarera de una caseta de la calle Guadalquivir. Un señor se venía aún más arriba con el análisis meteorológico: “Estamos posiblemente ante una de las mejores ferias de Córdoba”.
Lo que está claro es que el aficionado cordobés aprueba estas condiciones, de lo contrario, “ha
bría que empezar a pensar en adelantar las fiestas de mayo en el calendario”, como apuntaba otro señor arrimado a la tertulia del tiempo.
Uno que sale beneficiado es el fino. Sin la turra que pega el solazo se bebe más Montilla-Moriles, aunque tal vez “haga falta promoción, un letrero que se vea desde la portada y que ponga MontillaMoriles, faltan venenciadores en las casetas...”, enumeraba un buen conocedor del sector.
De todas formas, la cerveza sigue siendo la ganadora del envite, por más que se la carguen con barriles sin presión y vasos de cartón. Otras casetas optan por vasos de cristal, de tamaño maceta o de tubo, aprovechando los mismos que ponen para los cubatas. El sibarita en la Feria lo tiene todo perdido. “No me fío de las invitaciones a copas, son de garrafón”, es la frase con la que despide su Pantomima Full.