Portugal, dispuesto a inyectar hasta 2.000 millones en TAP para asegurar la continuidad
El Gobierno portugués está dispuesto a inyectar hasta 2.000 millones de euros en la aerolínea TAP para garantizar su continuidad, según apuntó ayer el ministro de Infraestructuras luso, Pedro Nuno Santos, tal y como avanzó Reuters. Para ello, antes la Comisión Europea tendrá que dar luz verde al plan de reestructuración presentado este jueves por la compañía y que supondrá recortar en torno a 2.000 puestos de trabajo de cara a 2022 y ajustar los costes de la empresa en un 25%.
Nuno Santos aseguró que si Bruselas aprueba la nueva hoja de ruta, TAP podría recibir hasta 1.170 millones de euros de ayuda estatal en 2021, un apoyo que podría incrementarse hasta los 2.500 millones hasta 2024, aunque desde el Gobierno confían en que finalmente se mantenga cerca de los 2.000 millones de euros.
La aerolínea pidió ayuda estatal en abril después de tener que suspender casi todos sus 2.500 vuelos semanales en pleno punto álgido de la crisis del coronavirus, ante las restricciones de movilidad. Este parón de la actividad, provocó unas pérdidas de 701 millones en TAP en los tres primeros trimestres del año, periodo en el que la aerolínea ha perdido el 70% de los pasajeros frente a un año antes. Tras este escenario, la empresa no espera alcanzar de nuevo el punto de equilibrio hasta 2025.
“El plan de reestructuración de TAP va a ser duro, pero es lo que hay que hacer para que la empresa sea viable a largo plazo, y pueda sobrevivir e incluso crecer en el futuro”, aseguró el titular de la cartera de Infraestructuras.
En el caso de que la Comisión Europea rechazara la nueva estrategia, TAP tendría que devolver inmediatamente un préstamo de rescate de 1.200 millones de euros acordado a principios de año, lo que podría llevar a la insolvencia de la compañía.