“Queremos formar a nuestros alumnos para profesiones que todavía no existen”
Tras 42 años como centro adscrito a la Universidad Complutense de Madrid, la Universidad Villanueva se ha estrenado este curso como institución de educación superior. José María Ortiz Ibarz, rector de esta institución, explica cómo está siendo este curso tan atípico.
¿Cómo afronta la Universidad Villanueva su primer curso en esta situación tan crítica?
Lo afrontamos con mucha ilusión, y también con responsabilidad. Responsabilidad porque tenemos que garantizar las condiciones de seguridad sanitarias, y porque no queremos que la actividad formativa se vea mermada de ningún modo en su calidad. Además, no perdemos de vista que somos una universidad, es decir, un lugar donde se hacen buenas preguntas. Y ahora la que más nos afecta es la reflexión sobre cómo compaginar las limitaciones que vivimos con la misión que tenemos. Tenemos que poner en marcha un proyecto en unas circunstancias que no esperábamos. Como ocurre en el deporte, cuando el viento arrecia de cara las diferencias son mucho mayores; y eso nos empuja a hacer las cosas cada día mejor.
¿Cuáles son los objetivos que se ha planteado para este curso académico?
Estamos empezando como universidad, y eso significa que hay que poner las bases, y hacerlo con generosidad. Tenemos que poner en marcha proyectos cuyos frutos recogerán otros con el paso de los años. ¿Qué tipo de proyectos? Sobre todo, los que tienen que ver con los procesos de aprendizaje y la formación del carácter. Estamos ensayando y poniendo a prueba nuevas formas de trabajar. Queremos aprovechar esta especie de shock tecnológico que vivimos para acelerar la adquisición de competencias digitales. Y estamos muy atentos, dentro del nuevo entorno virtual de enseñanza-aprendizaje, a la personalización, a la adaptación a cada persona, y también a la nueva narrativa digital que en una universidad no puede separarse de la búsqueda de la verdad.
¿Cuál es la metodología por la que se va a caracterizar la Universidad Villanueva?
Nuestro modelo educativo busca la personalización, y sin duda eso se consigue mejor de modo presencial. Queremos ser y somos una universidad presencial. Ahora la presencialidad no solo es física, sino que muchas veces también es síncrona. Pero la observación y desarrollo de competencias personales se desenvuelve mejor en un entorno de cercanía física. Por eso, la mezcla de metodologías (que nos lleva a una enseñanza híbrida o blended) nos obliga a focalizar mejor. Queremos acompañar a nuestros alumnos para que vivan experiencias transformadoras, porque a lo largo de la historia todos los que han sido unos fuera de serie han vivido experiencias particularmente intensas y significativas.
¿Qué características distinguen a esta universidad de otras instituciones de educación superior?
La más obvia es nuestra juventud. Somos los últimos en llegar, aunque nos preceden 42 años de historia como centro adscrito. Nos anima mucho pensar que todo lo grande comienza siendo pequeño. Tenemos muchas ganas de seguir aprendiendo y creciendo, y tenemos algunas ventajas, propias de tener menos historia que otros: podemos movernos más rápido, y podemos anticipar y adaptarnos mejor al futuro. Sobre todo, tenemos muy clara nuestra misión, visión, valores y modelo; y eso seguramente es clave en momentos en los que la incertidumbre y la imprevisibilidad parecen ser lo único cierto. Queremos formar a nuestros alumnos para entornos, profesiones, modelos y situaciones que todavía no existen, y lo hacemos trabajando competencias como la innovación, la adaptabilidad, la creatividad: sobre todo fomentando una mirada hacia la realidad libre de prejuicios. El mundo que nos rodea se transforma cuando cambia nuestro modo de verlo.
¿Cuáles son las formaciones más populares en la Universidad Villanueva?
Las áreas de conocimiento en las que están nuestros Grados y Postgrados son el Derecho, la Empresa, la Educación, la Comunicación y la Psicología. Es decir, que estamos en el ecosistema donde más impacta la innovación disruptiva. La tecnología está provocando nuevas formas de trabajar, nuevos modelos de negocio, nuevos modos de regulación, y todo ello nos está obligando a repensar el ser personal humano; y ahí la antropología y la psicología tienen mucho que decir. Por eso, queremos ser también una universidad atenta a las nuevas realidades. Cuando decimos que somos una universidad centrada en las personas queremos que eso signifique dos cosas: que somos capaces de utilizar toda la tecnología para personalizar cada proceso básico de aprendizaje y motivación, y además que somos capaces de llegar a cada una, de tocar el corazón de cada persona que se nos acerque.
¿Cómo ha sido la acogida como universidad de esta institución?
Lo más importante ha sido constatar la satisfacción (más aún, la emoción) de quienes han trabajado durante años para que Villanueva pudiera llegar hasta aquí. A todos los que ahora trabajamos en este proyecto (consejo de administración, directivos, profesores, personal de administración y servicios, alumnos, familias) nos ha alegrado mucho poder agradecerles que en su día pusieran en marcha lo que ahora es ya una universidad de pleno derecho. También agradecemos a la Comunidad de Madrid su confianza al aprobarnos. Y, cómo no, a la Universidad Complutense en cuyo seno ha madurado Villanueva.
“Las áreas de conocimiento de nuestros Grados y Postgrados son el Derecho, la Empresa, la Educación, la Comunicación y la Psicología”