El Capitolio entorpecerá el ambicioso estímulo fiscal de 1,9 billones de Biden
El consenso con los republicanos amenaza con mermar la cuantía del plan
El presidente electo de Estados Unidos, el demócrata Joe Biden, tomará posesión de su cargo la próxima semana con el objetivo de implementar un robusto plan de estímulo fiscal por valor de 1,9 billones de dólares, cerca del 8,6% del PIB. Una hoja de ruta que aderezará el próximo mes con la segunda vía de su propuesta económica, centrada en la inversión en infraestructura.
El paquete más inmediato incluye pagos directos de 1.400 dólares por contribuyente o iniciativas como elevar el salario mínimo federal desde los 7,25 dólares a los 15 dólares a la hora. Precisamente esta última medida así como la oronda factura de cabecera planteará problemas no solo para contar con el apoyo bipartidista en el Senado sino también para recibir el apoyo de los demócratas más conservadores.
El próximo inquilino de la Casa Blanca abogó por un gasto sustancial en buena parte de las áreas que proyectaban los economistas. Además de incluir 1.400 dólares adicionales por contribuyente busca extender los beneficios adicionales por desempleo hasta septiembre de 2021 e incrementar el pago complementario a 400 dólares semanales.
También propuso 170.000 millones de dólares en fondos para la reapertura segura de los colegios, aumentar el crédito fiscal por hijo y la ampliación de los subsidios a las primas de los seguros médicos, entre otras iniciativas.
El paquete recoge cheques para los contribuyentes y un alza del SMI a 15 dólares la hora
Biden como los demócratas del Congreso han indicado que esperan aprobar estas propuestas a través de un apoyo bipartidista, que requerirá 60 votos en el Senado,
y por lo tanto el apoyo de al menos 10 republicanos. Un escenario que parece poco probable. Incluso no se sabe si todos los senadores demócratas apoyarán el plan en su conjunto, dado que el senador Joe Manchin mostró sus reticencias a elevar los pagos directos.
Escollos internos Es por ello que los economistas coincidían en resaltar que los estímulos más inmediatos serán más comedidos, entre 500.000 millones y 1,1 billones de dólares. Si Biden no puede atraer 60 votos en el Senado para pasar el total de su propuesta, aún podría tratar de impulsarlo a través del proceso de reconciliación del presupuesto, que solo requiere una mayoría simple.
Pero la reconciliación cuenta con limitaciones adicionales, retrasaría la aprobación de las medidas y solo puede usarse una durante el año fiscal. E incluso si opta por esta ruta, todavía no está claro si todos los legisladores de su partido, especialmente en el Senado, apoyarán íntegramente todas las partidas. mación. Concretamente, en esta última edición, Merco ha contado con la participación de 1.141 directivos de grandes empresas, 84 expertos en RSC, 82 periodistas de información económica, 32 miembros de gobierno, 72 analistas financieros, 63 social media managers, 88 responsables de ONG, 71 miembros de sindicatos y 79 responsables de asociaciones de consumidores, así como 8.300 ciudadanos.
En el estudio, CaixaBank ha obtenido un total de 8.562 puntos en una escala de 10.000, la mejor valoración entre todos los bancos españoles y la cuarta mejor puntuación del ranking global de todos los sectores, que encabezan Inditex (1º), Mercadona (2ª) y Grupo Social ONCE (3º). La clasificación conseguida en 2020 supone repetir el puesto alcanzado en la edición Merco de 2019, en la que CaixaBank también fue la cuarta organización con mejor puntuación de entre todos los sectores.
Por otro lado, dada la situación de pandemia, Merco ha realizado un estudio específico de la actuación de las empresas para contribuir a comTanto batir los efectos del Covid-19. En este índice, CaixaBank se ha situado también entre las diez mejores compañías de España, con 5.392 puntos (7ª posición).
El reconocimiento de Merco supone un aval a su modelo de banca universal socialmente responsable, basado en la calidad, la cercanía y la especialización en productos y servicios adaptados para cada segmento, con una clara misión de contribuir al bienestar financiero de sus clientes y apoyar el progreso de las comunidades donde desarrolla su actividad.
Entre sus principales compromisos, destaca su papel en la inclusión financiera de la población española, con la mayor red de oficinas del sector en el país y la mayor capilaridad territorial. CaixaBank está presente en el 100% de las poblaciones de más de 10.000 habitantes y en el 94% de las de más de 5.000, y es la única entidad con oficina en 229 municipios. Otra de sus principales líneas de actuación es la financiación a particulares y empresas y, en especial, a colectivos con dificultades en el acceso al crédito.