Madrid arranca el Plan Vive con 6.646 pisos de alquiler
La construcción de estas viviendas moverá una inversión privada de más de 700 millones
La Comunidad de Madrid ha puesto en marcha el Plan Vive Madrid, una iniciativa que permitirá construir en los próximos ocho años unas 25.000 viviendas de alquiler a precios asequibles sobre suelos públicos y con la inyección de capital privado, que movilizará en una primera fase más de 700 millones de inversión. Concretamente, el Gobierno regional inició ayer el procedimiento para licitar la concesión de las primeras 46 parcelas que están situadas en 14 municipios de la región y se estima que se construirán en ellas un número máximo de 6.646 viviendas. “Este Plan permitirá ahorrar a la Administración regional más de 3.500 millones de euros, ya que ese coste correrá a cargo de las empresas constructoras de estas viviendas que las alquilarán tanto a jóvenes como a familias vulnerables, mujeres víctimas de la violencia de género o personas con discapacidad, al precio estipulado por la Comunidad de Madrid. Es decir, un precio mucho más accesible que el precio de mercado”, explica David Pérez, consejero de Vivienda y Administración Local, que ha destacado que “con su publicación ayer en el BOCM, la Comunidad de Madrid da el pistoletazo de salida a uno de los proyectos más ambiciosos en materia de alquiler de vivienda en Europa en los últimos años”.
Asimismo, Pérez apunta que el Plan Vive generará al año 57.000 empleos anuales durante la construcción y explotación de las viviendas, lo que supondrá un importante impacto económico y social en la región, que contribuirá a superar la crisis económica que ha generado la pandemia del Covid-19.
Ahorro de 19 millones por año El consejero de Vivienda detalló que se calcula que el Plan Vive Madrid beneficiará cada año a 17.000 inquilinos, con un ahorro anual en el alquiler medio de mercado de 19 millones de euros y con un impacto en el PIB regional, durante todo el periodo de concesión, de 4.428 millones de euros. Además, esta iniciativa generará 719 millones de euros por los diferentes tributos que percibirán las Administraciones Públicas.