La hostelería se hunde sin ayudas un 71% en Baleares y un 60% en Canarias
Madrid logra resistir a duras penas y las ventas caen menos de la mitad
Los bares, restaurantes, cafeterías, hoteles y demás negocios de alojamiento se desangran en España. La cifra de negocios de la hostelería, incluyendo el alojamiento, descendió en 2020 un 51,4% respecto al año anterior, según los datos de los Indicadores de Actividad del Sector Servicios del INE. Este descenso supone una pérdida cercana a los 67.000 millones de euros, respecto a la facturación que se alcanzó en 2019. Todo ello ha provocado ya el cierre de 100.000 establecimientos y la pérdida de casi medio millón de empleos, mientras el sector urge a que se aprueben ayudas.
La evolución de la actividad en 2020 ha sido diferente, no obstante, en las dos ramas de actividad hostelera. En la de restauración, los servicios que se pudieron mantener de envío a domicilio en los meses de cierre total, así como una mayor dependencia del consumo nacional han hecho que la caída media del año, aunque destacada, sea algo más suave, del -43,6% respecto a 2019. En el alojamiento, más dependiente del turismo la caída fue sin embargo más acusada, del -68%.
Por comunidades autónomas, la caída el año pasado fue especialmente fuerte en Baleares, con un descenso del 70,8% y en Canarias, con el 59,8%, debido precisamente a la gran despendencia de la llegada de turistas. En Cataluña, una de las comunidades donde más reestricciones ha habido, se registró un descenso del volumen de negocio del 52,6% y en Andalucía del 51,7%.
En Madrid, en cambio, la caída fue inferior al 50%. Las que mejor han soportado la crisis han sido la hostelería asturiana y extremeña, con caídas del 38,9% y el 38,8%, respectivamente. Desde la patronal Hostelería de España, que está pro
La restauración perdió el 43% de su negocio y el alojamiento un 68% en 2020
moviendo la solicitud de indemnizaciones, explican que “el cese prácticamente total de la actividad desde mediados del mes de marzo hasta junio en los que se decretó por primera vez el estado de alarma, afectó de manera muy significativa al sector hostelero, con las mayores caídas en los meses de abril y mayo”. Con la desescalada y la llegada de la nueva normalidad se observó una recuperación en tasa mensual desde mayo, y una moderación de la caída interanual en los meses de julio y agosto. Sin embargo, después del verano, la evolución positiva se frenó, volviendo a descender en tasa intermensual, y a acentuarse la caída interanual hasta noviembre.
En diciembre hubo de nuevo una recuperación de la tasa mensual, después de tres meses consecutivos de caída, con un aumento de un 25,9% respecto a noviembre. La caída interanual se suavizó 7 puntos respecto a la del mes anterior, hasta -52,9%.
En el mes de diciembre, por su parte, tuvo lugar un repunte en la evolución mensual, de un 27,5% en restauración y un 16% en el alojamiento. En tasa interanual, la caída se moderó en los dos subsectores, 6,7 puntos en restauración, hasta el -45,6%, y 4,1 puntos en el alojamiento, hasta el -75,9%, con relación al mismo mes del año anterior.
Ante esta situación, nueve patronales del la hostelería y el comercio se unieron la semana pasada para exigir al Gobierno y a las comunidades autónomas ayudas directas de forma urgente e inmediata por valor de 12.500 millones de euros con el objetivo de evitar más quiebras y cierres.