Los modelos híbridos marcarán el futuro del trabajo en las empresas
Las compañías abogan por gestionar la digitalización poniendo el foco en la gestión de personas
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España puede convertirse en el primer país de la UE en atraer talento digital” Pilar López Presidenta de Microsoft Ibérica
Las nuevas formas de trabajo es uno de los mayores retos propiciados por la crisis del coronavirus. Y es que, la llegada del Covid-19 ha puesto en perspectiva la rutina del trabajo tradicional hasta el punto de convertir la combinación entre teletrabajo y trabajo presencial en una de las fórmulas más adoptadas por compañías de todos los tamaños.
“Se trata de construir un futuro que requiere madurar los modelos de trabajo improvisados que han tenido que adoptar las organizaciones desde el inicio de la pandemia, para convertirlo en una experiencia de trabajo más eficiente, funcional y humana”, ha explicado Luis Díaz, managing director de Talento y Organización de Accenture, durante la celebración de la quinta edición de los Premios Digital Talent.
Desde Accenture llevan muchos años ayudando a grandes líderes en transformación digital a evolucionar sus entornos de trabajo bajo una noción del workplace como organismo vivo, que se reinventa continuamente y que incorpora nuevas capacidades para desarrollar ecosistemas colaborativos más funcionales que abarquen a toda la organización.
Sin embargo, pasar con éxito de los mínimos productos viables de trabajo en remoto que tienen gran parte de las empresas a día de hoy a esta noción de workplace como organismo vivo plantea dos retos: uno tecnológico, “que no es menor, pero no debe intimidarnos, porque la tecnología está ahí y sabemos cómo ponerla al servicio de este workplace, y aunque requiere una inversión, esta inversión tiene un retorno claro e inmediato”, asegura Luis Díaz.
Por otro lado, el director de Talento y Organización de Accenture destacó el reto humano. “¿Cómo conseguimos este modelo? Requiere repensar la cultura para hacerla más adaptativa y resiliente, repensar el liderazgo e incluso regenerarlo para tener líderes digitales, dar con nuevas claves de gestión de la productividad y del engagement y ocuparse de manera activa y continua del impacto emocional que tiene la interconexión en las personas y los equipos”.
En definitiva, “lograr una gestión del cambio diferente con mayor sensibilidad a la hora de repensar experiencias más humanas, incluso de transformación, y que precisa de un uso inteligente de la tecnología y de los datos para guiar ese cambio de comportamiento hacia el nuevo paradigma que es el trabajo híbrido”, añadió.
Tras la ponencia de Luis Díaz, se dio paso a la mesa de debate moderada por Maite Sáenz, directora de ORH, que reunió a Josu Jon Imaz, CEO de Repsol, y Pilar López, presidenta de Microsoft Ibérica, quienes debatieron sobre el protagonismo de las personas y de las organizaciones en el mundo híbrido.
Y es que, cada vez que se habla de transformación digital se hace
Es necesaria una experiencia de trabajo más eficiente, funcional y humana
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Hay que tener la lealtad de no utilizar la digitalización para catalizar la salida de empleados” Josu Jon Imaz CEO de Repsol
Se requiere actualizar las competencias de los trabajadores en las organizaciones
desde la perspectiva de lo que ha venido para quedarse, pero no desde la visión de lo que no se va a volver a ver en los entornos de trabajo. Bajo este contexto, la presidenta de Microsoft, comenzó su intervención asegurando que hemos perdido ese presencialismo que veíamos en muchas ocasiones. “Quizá se han acabado esas organizaciones tan tradicionales que todavía existían a día de hoy sustituyéndola se de forma rápida por unos entornos mucho más flexibles, ágiles y de colaboración. Estamos ante una oportunidad única de modernizar las organizaciones y la cultura y de que esto tenga un impacto muy relevante en el modelo de negocio y en los objetivos de las compañías”.
Asimismo, las relaciones humanas dentro de una empresa son un factor muy importante para alcanzar el éxito. En este sentido, la crisis sanitaria ha dejado huella en la forma de relacionarnos, de socializar y de trabajar. “Necesitamos tocarnos, volver a salir, generar grupos físicos... La falta de presencialidad mata la innovación y la eficiencia. Tenemos que combinar lo mejor de los dos mundos”, señala el CEO de Repsol.
Aprendizajes El desafío para las empresas reside en asegurarse de que sus profesionales se sienten conectados y perciben claramente cómo el trabajo en equipo contribuye a hacer realidad la visión de la empresa.
“Cuando hablábamos de digitalización hace un año siempre hablábamos de la transformación cultural que requería, de la importancia de las personas... pero creo que no estábamos tan convencidos como lo estamos ahora. Este sería el primer aprendizaje, la importancia de la cultura, de las personas, de la gestión del cambio; y esto se ha puesto de manifiesto en los últimos doce meses. La gestión del cambio nunca ha sido más fácil porque nunca nos habíamos lanzado a hacerlo en tan poco tiempo, pero lo hemos hecho y nos hemos demostrado qué cosas funcionan, qué cosas son incluso mejores y qué cosas estamos deseando que acaben, porque el componente social en el mundo empresarial es fundamental”, apunta Pilar López.
Asimismo, puso el foco en los tiempos que hemos necesitado para muchas de estas transformaciones con base tecnológica. “En Microsoft decimos que en los primeros dos meses de pandemia vimos transformación digital que esperábamos en los próximos dos años. La hemos visto en un plazo cortísimo, hemos visto la capacidad que tenemos para digitalizarnos, para adaptarnos a los clientes, para mantener el contacto con los empleados... Hemos hecho en tiempo récord los plazos y las expectativas de la digitalización”, añade la presidenta de Microsoft Ibérica.
Por su parte, Josu Jon resaltó cómo durante estos meses desde Repsol han tenido que combinar las cadenas físicas de suministro con el mundo digital y la operación en remoto. “Hemos tenido que sacar lo mejor de estos dos mundos para seguir funcionando y abasteciendo de servicios esenciales a la sociedad a lo largo de estos meses. Ha sido un año que hemos dado pasos de gigante en Repsol, hemos sido capaces de articular ese mundo
phygital a la vez que avanzamos estratégicamente como compañía hacia el futuro”.
Talento digital Otro de los temas abordados durante el evento fue acerca del potencial de España para atraer talento internacional y dar ese salto a nivel digital. Para Pilar López, España puede convertirse en el primer país de la Unión Europea a la hora de atraer talento digital. “Algunos datos que nos permiten ser optimistas son que, en primer lugar, España es el cuarto país en Europa en profesionales cloud que trabajan desde España, para muchos otros mercados, pero que viven y trabajan aquí. Asimismo, y según LinkedIn, en los próximos cinco años se pueden crear dos millones de trabajos en el mundo de la tecnología, no necesariamente en empresas tecnológicas. Estas dos realidades nos hacen ver que España puede convertirse en un hub de talento digital”, declaró.
Sin embargo, existen retos que afrontar para conseguirlo. “Hay otros datos que no nos permiten ser tan optimistas. España ocupaba el puesto 23 en el último ranking mundial en términos de competitividad si mirábamos las capacidades digitales. Hay que elevar esa capacitación digital a todos los niveles. En Microsoft lanzamos un programa de capacitación a nivel mundial, con mucho impacto en España, y desde finales de julio más de 500.000 personas se han formado de manera gratuita en las últimas tecnologías”, apuntaba Pilar López.
Y es que, el talento requiere actualizar las competencias de los trabajadores en las organizaciones. No obstante, Josu Jon previamente puso en valor cómo en España “cuando un trabajador oye hablar de digitalización se asusta porque ve posibles despidos futuros, y esto hay que tenerlo en cuenta”. Por ello, apuesta por avanzar en el camino de la digitalización, pero con un doble compromiso: “Si no nos digitalizamos se va a perder competitividad y las posibilidades de crecimiento como empresa, pero a su vez, hay que tener la lealtad para no utilizar la digitalización como un elemento para catalizar la salida de personas de las organizaciones”, aseguró el CEO de Repsol.
A esta lucha por el talento habría que añadir la capacidad de digitalización y dotación al empleado de herramientas para navegar y desarrollarse en el entorno digital. Así, en la apuesta por preparar a los trabajadores en este proceso, muchas compañías reentrenan a sus equipos para que puedan seguir desempeñando su trabajo dentro de la empresa, con las suficientes garantías. De hecho, se estima que para 2025 y tras el proceso de digitalización que están viviendo las empresas, más del 50% de los trabajadores necesitará un reskilling y upskilling de sus habilidades. “Es muy importante pensar en el
reskilling, en la formación de las personas. Para Repsol este es un compromiso totalmente necesario en estos momentos, estamos en un proyecto para formar a 800 personas en datos, en inteligencia artificial, y que todos podamos prepararnos para hacer frente a los retos. Tenemos que avanzar en la transformación de nuestros centros industriales, en mejorar la seguridad de las personas en nuestras plantas a través de nuevas herramientas, de mantenimiento predictivo, de mejores operaciones, de más seguridad de los procesos, de crecimiento... pero para esto necesitamos trabajar todo el colectivo convencido de que es una oportunidad para todas las personas de la compañía”, incidió el CEO de Repsol.
Para finalizar, María José Sobrinos, directora de RRHH de Accenture, agradeció la presencia de los participantes al acto, así como de los más de 65 candidatos que han participado en esta edición. “Muchas de estas iniciativas son un claro resultado del tiempo que estamos viviendo. Hemos visto el esfuerzo en potenciar el trabajo en remoto por la pandemia, iniciativas de desarrollo de trabajos híbridos, o de digitalización de ámbitos donde tradicionalmente había un importante componente presencial”.
Asimismo, concluyó señalando que una de las cosas que más destaca de estos premios es que “vemos el impacto de una transformación digital que está focalizada sobre todo en la gestión de personas; un factor clave para transformar una organización y hacerla más competitiva y sostenible en el mercado”.
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La gestión de personas es un factor clave para transformar una organización” María José Sobrinos Directora de RRHH de Accenture
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Es necesario pasar a un entorno de trabajo que se reinvente continuamente” Luis Díaz Managing director de Talento y Organización de Accenture