Illa reactiva contactos por si falla el acuerdo ERC-Junts
Aragonès concede a la CUP un modelo energético público, crear una Renta Básica Universal y limitar a los ‘Mossos’
Las negociaciones entre ERC y Junts para acordar un nuego Govern de la Generalitat con Pere Aragonès al frente parecen complicarse cada día más en vez de agilizarse, y ello ha animado al candidato del PSC, Salvador Illa, a mover ficha y reivindicar su derecho a presentarse a la investidura. Los socialistas ya se han reunido con En Comú Podem y esperan hacerlo con Cs y PP para buscar apoyos, aunque los números no les permitan salir victoriosos. Precisamente la líder de los comuns, Jéssica Albiach, descartó ayer apoyar a Illa porque su candidatura no tiene opciones de prosperar, aunque también rechazó dar su apoyo a Aragonès mientras priorice la alianza con Junts per Catalunya.
Desde la formación liderada por Carles Puigdemont -a quien ayer el
Tribunal Constitucional le mantuvo la orden de detención si vuelve a España- critican que ERC haya cerrado antes un pacto con la CUP, que sería el aliado minoritario de la Generalitat independentista.
Este martes se conocieron todos los detalles del acuerdo entre ERC y la CUP, que incluye un margen de dos años para la Mesa de Diálogo entre la Generalitat y el Gobierno antes de darla por fracasada. También supone que Aragonès se sometería a una cuestión de confianza a mitad de legislatura.
A Junts le ha molestado especialmente que se relegue en estos planes al Consell per la República de Puigdemont, que para los neoconvergentes es prioritario, pero el documento recoge concesiones para la CUP más allá de la estrategia secesionista, como la creación de un modelo energético público (con una eléctrica pública, remunicipalización del agua y recuperación de las concesiones hidroeléctricas caducadas), la implantación de una Renta Básica Universal por fases, y límites para la acción de los Mossos.