“Haré la mayor bajada de impuestos de la historia: medio punto en IRPF”
Isabel Díaz Ayuso Presidenta de la Comunidad de Madrid
La candidata del PP a revalidar la Presidencia de la Comunidad de Madrid el próximo 4-M, Isabel Díaz Ayuso, departe con elEconomista sobre la coyuntura, el escenario político y sus planes de futuro. Afirma que si gobierna llevará a cabo las mayores bajadas de impuestos de la historia, con un recorte de medio punto en todos los tramos del IRPF. Cree que se equivocan quienes piensan que mantener los negocios abiertos va contra la salud, y asegura que a los instigadores de la madrileñofobia les pasará factura, porque, de hecho, ya han conseguido el efecto contrario.
Cuando le preguntas, a bocajarro, si es, como dicen algunos, una política correosa que detrás de su imagen tranquila esconde un animal político duro e implacable con sus adversarios, niega la mayor, se califica de muy previsible, e insiste en que siempre dice lo que piensa. “Lo que no hago es salirme de mis principios, no titubeo, ni hago politiqueo, y siempre rechazo de plano las imposiciones, lo políticamente correcto y las etiquetas. Me gusta ir al grano de las cosas, y no me disfrazo de lo que no soy”, sentencia. Isabel Díaz Ayuso ( Madrid, 1978), licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense y Máster en Comunicación Política y Protocolo, es plenamente consciente de que ser una de las figuras políticas más importantes del país la ha convertido en el pimpampum de la oposición, pero no se queja. Es una líder pata negra del PP, partido en el que milita desde 2005, donde ha ocupado distintos puestos en la Administración y en la Asamblea autonómica con Esperanza Aguirre y Cristina Cifuentes. Sus amigos dicen que la candidata del PP a la presidencia de la Comunidad de Madrid en la cita electoral del 4-M es una mujer liberal, trabajadora hasta la extenuación, muy imaginativa y sin complejos por no ser de izquierdas: “Habla de una manera libérrima ante la opinión pública y tal vez en eso está el secreto de su éxito”, señalan. Durante la entrevista –en su despacho oficial de la madrileña Puerta del Sol– no hay pregunta sin respuesta, ni siquiera cuando la periodista se interesa por aspectos más personales de esta campaña. “No paro, pero estoy contenta. La gente se acerca a mí con mucha simpatía, sin hostilidad y eso es muy reconfortante. Vuelo sin equipaje y eso para estar en la primera línea política es fundamental, por mucho que intenten buscarme las vueltas”, afirma. Cree que no tendrá que mudarse de su despacho “los madrileños me quieren y se nota”. Es genio y figura.
¿Finalmente ha corrido un riesgo innecesario convocando unas elecciones que le pueden costar la Presidencia de la Comunidad de Madrid o se reafirma en su decisión?
Convocar las elecciones es la única opción que tenía porque éramos conscientes de que se iba a plantear una moción de censura, apoyada por Ciudadanos para intentar un cambio de signo político en la Comunidad de Madrid. Yo simplemente me adelanté a esa moción para que sean los madrileños quienes decidan con su voto el futuro que quieren.
¿Que Pablo Iglesias haya dejado la Vicepresidencia del Gobierno para competir con usted significa que estas elecciones trascienden el campo autonómico?
Lo que significa la candidatura de Pablo Iglesias es que el proyecto de Más Madrid y Podemos está acabado. La gente en Madrid quiere ser libre, llevar las riendas de su vida y no quiere vivir con miedo, como en Venezuela. Iglesias viene a emponzoñar la campaña, a sembrar el odio, y por eso intenta, agitando el avispero, reflotar un proyecto liquidado para intentar al menos entrar en la Asamblea, y si no lo consigue este desecho de tienta debería plantearse volver a su casa. Además, tiene dos para elegir: la de Vallecas y la de Galapagar. Él no tiene problemas de alquiler ni de vivienda.
¿El “hombre soso”, como se auto
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denomina Gabilondo, está haciendo campaña sucia como denuncian ustedes?
El “hombre soso” está siendo muy mentiroso. Miente cuando dice que no pactará con Iglesias, porque lo hará, y miente cuando niega que va a subir los impuestos. El presidente del Gobierno ha llamado a Madrid paraíso fiscal y él nunca lo ha desmentido.
Oiga, ¿Inés Arrimadas va a ser historia si no consigue grupo parlamentario?
Yo me he comprometido a desearles todo lo mejor y respetar en todo momento a Vox y a Cs. Bien es verdad que con más lealtad dentro de este gobierno por parte de Cs las cosas hubieran funcionado mejor.
Sea como fuere, todas las encuestas le dan a usted como ganadora el 4-M, pero para obtener mayoría absoluta necesitará el apoyo de Vox o Ciudadanos. ¿Cuál de los dos prefiere de compañero de viaje?
Tengo claro qué Gobierno quiero, con qué consejeros y qué estructura, y voy a pelear por obtener una mayoría que me permita gobernar en solitario.
¿Qué le parecen los hechos ocurridos en el acto convocado por Vox que terminó con varios heridos y detenidos?
La izquierda y la ultraizquierda han perdido el sentido de la calle en Madrid. Los barrios, y especialmente los más humildes, no los quieren. Podemos y Más Madrid son partidos de dirigentes ricos para unos ciudadanos cada vez con menos poder adquisitivo. Ellos saben que han decepcionado a muchos, y eso les lleva a provocar algaradas para causar ruido mediatico, pero ya no cuela. Madrid es libertad, y es vergonzoso lo ocurrido en Vallecas y las reacciones de Podemos y Más Madrid.
Bueno, de usted también dicen que es una radical que ha unido su suerte a Vox…
A mí que la ultraizquierda me insulte no me importa, tengo muy claro que quiero un Madrid en libertad. No quiero convertir Madrid en una especie de Caracas, de república bolivariana donde haya una población amedrentada donde se puedan expropiar viviendas. que esté tomada por los okupas y los manteros, y se persiga a los comerciantes que pagan sus impuestos, y a las clases medias. Madrid no es Caracas, y Pablo Iglesias lo sabe.
¿Cómo se sobrevive todos los días a insultos de gran calibre? Porque a usted le han llegado a llamar asesina por el tema del Covid…
Insisto que a mí los insultos no me afectan, pero sí me ofende que me echen a la cara los muertos del Covid, y eso es algo que ha alimentado el presidente del Gobierno para ocultar su ineficacia a la hora de gestionar la pandemia. Ningún presidente ha llegado tan lejos ni ha utilizado políticamente a los muertos como ha hecho Sánchez. Yo siento pena por España, por que este país esté en sus manos, porque con políticos así va a ser muy difícil salir fortalecidos.
Admita que se ha convertido en una especie de ‘Pepito Grillo’ en las reuniones de presidentes autonómicos. ¿Esa ha sido una estrategia para fortalecerse?
En absoluto. Yo no he pretendido ser el Pepito Grillo de las reuniones de presidentes. Durante esta crisis mi equipo sanitario ha liderado la pandemia en España, y yo he defendido con pasión lo que creo que es mejor para los ciudadanos a los que represento. Defiendo los intereses de Madrid y de España, y si para eso he tenido que discrepar con el presidente del Gobierno o con algunos de otras autonomías he cumplido con mi obligación.
¿Al final ha podido encontrar la fórmula mágica para preservar la economía y la salud?
El Gobierno de España ha abandonado a este país a su suerte, y yo he protegido a la hostelería, a la restauración, a la cultura y a los comercios porque ellos no tienen la culpa de la incapacidad del Gobierno y de su presidente. He creado un comité de expertos real, no como ese comité fantasma que dijo el presidente que crearía, y aquí hemos puesto en marcha los mejores mecanismos para combatir la pandemia. Hemos sacado adelante dos hospitales públicos: el Zendal e Ifema, comprado cinco millones de test, y defendido con pasión la vida y la libertad. Se equivocan quienes piensan que mantener los negocios abiertos va contra la salud. La economía también es salud, y algún día conoceremos las cifras de suicidios, depresiones, y la pobreza en la que ha sumido a millones de personas Pedro Sánchez por hacer políticas de brocha gorda.
Lo que resulta paradójico es que, tras su denuncia de sabotaje en el Zendal, desparecieran, e incluso los ministros se hayan ido a vacunar allí…
Lo ocurrido con el Zendal demuestra el trato infame que ha recibido Madrid durante este año por parte del Gobierno. Fuimos los primeros que decidimos cerrar los colegios y en adoptar todo tipo de medidas que recibieron la negativa del Gobierno con el consiguiente linchamiento de su entorno mediático, para finalmente darnos la razón. Nos criticaron duramente con los test en las farmacias, los controles en Barajas, las mascarillas o el pasaporte Covid. Todo lo que criticaron que hacíamos en Madrid lo han terminado haciendo ellos.
¿Cuando afirma que va a acometer la mayor bajada de impuestos de la historia a qué se refiere?
Voy a llevar a cabo las mayores bajadas de impuestos de la historia y ya lo estoy haciendo. Aparte de las deducciones fiscales que llevamos en el programa electoral, y la reducción de trabas burocráticas, queremos hacer una rebaja del IRPF de medio punto en todos los tramos. Además, haremos modificaciones en la ley del suelo para sustituir licencias por declaraciones de responsabilidad, y, en definitiva, haremos una comunidad cada vez más flexible y un proyecto que permita a todo aquel que quiera emprender un negocio cumplir sus sueños y arriesgarse.
¿Esa imagen de las fiestas ilegales en pisos turísticos podían haberse evitado con mayores controles en Barajas?
En Barajas no se ha hecho ningún control eficaz y, de hecho, Ábalos ha conseguido que sea la puerta de entrada del virus en la primera, en la segunda, y en la tercera ola. Madrid está muy expuesta, ya no solo por su densidad de población, sino porque es el kilómetro cero de las carreteras, de la red ferroviaria y porque tiene uno de los aeropuertos con más tráfico del mundo. El responsable del descontrol de Barajas es el Gobierno.
Oiga, ¿a usted la madrileñofobia promovida en otras autonomías le ha desgastado o fortalecido?
La madrileñofobia lo que ha provocado es que los madrileños y los ciudadanos de todo el mundo que viven y trabajan aquí hayan sentido un orgullo de pertenencia a esta comunidad, donde se vive en libertad y con prosperidad. Se ha despertado un enorme sentimiento en España de amor hacia Madrid, y muchos españoles están abochornados y absolutamente en contra de las maniobras que han intentado algunos dirigentes en sus comunidades. A los que han intentado crear esa madrileñofobia se les volverá en contra porque los madrileños no lo van a consentir.
Dígame , ¿la vacunación se ha convertido en el campo de batalla de la campaña del 4-M?
La sanidad pública madrileña ha sido siempre el campo de batalla de la izquierda. Están muy vistos. Siempre que hay elecciones recurren a viejos mantras como que la derecha va a privatizarlo todo, que el Zendal es un hangar, que atentamos contra la sanidad pública, y otras mentiras.
La última vez que le han llamado desleal ha sido por las conversaciones para adquirir la vacuna ‘Sputnik’…
Yo no tengo que ser leal al PSOE, sino a los madrileños, y siempre que tenga la oportunidad de reunirme con empresas sanitarias para intentar salvar vidas lo haré. En el caso de Sputnik, la Consejería recibió a esta empresa, porque ellos ofrecieron sus servicios, y ahí quedo la cosa, porque mientras no haya un certificado de la Agencia Europea y la Española del Medicamento respecto a esa vacuna no se puede avanzar.
¿Y qué va a pasar con la vacunación de AstraZeneca que tan desconcertados tiene a los ciudadanos?
Lo ocurrido con AstraZeneca demuestra que el equipo sanitario del Gobierno es una jaula de grillos que cambia continuamente de criterio. Ahora no saben qué van a hacer ni cuántas nos van a dar, pero mágicamente, en puertas de las elecciones, han decaído el estado de alarma, ya no me obligan a cerrar Madrid y han aparecido millones de vacunas. El desconcierto que ha provocado el Gobierno con AstraZeneca es tremendo. Hay personas que ya han recibido la primera vacuna, y ahora no la pueden completar.
¿Pedro Sánchez se la juega por afirmar que antes del verano se habrá vacunado el 70% de la población?
Sánchez nunca ha cumplido ninguno de sus compromisos y no ha dejado de mentir desde que llegó a La Moncloa. Espero que la mala gestión que ha hecho de la pande
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mia y de la crisis económica le pase una enorme factura en las urnas y más pronto que tarde sea desalojado de La Moncloa.
¿Usted cree que de cara al final del estado de alarma va a necesitar permiso judicial para mantener algunas de sus medidas?
Sánchez dice que no quiere alargar el estado de alarma, y yo lo celebro porque estoy absolutamente en contra. Llevamos un año esperando, y han sido incapaces de darnos un armazón legislativo. Por tanto, a falta de leyes y de seguridad jurídica, iremos a los tribunales para pedir amparo para ver si las normas que estamos aplicando en Madrid se pueden prolongar.
¿Está diciendo que el Gobierno no tiene un plan para España después del estado de alarma y en la etapa post-Covid?
El Gobierno tiene un plan que consiste en deshacer todo lo que conseguimos en el 78 en términos de democracia, convivencia y libertad. Su plan es imponer una España republicana, donde el Rey no cuente, e ir a un país subvencionado y empobrecido, donde los padres no puedan decidir a qué colegio llevar a sus hijos y no sean libres para elegir hospital.
La deuda en España es casi ocho veces mayor que la de la Comunidad de Madrid. ¿Puede ser una inyección de optimismo y un incentivo para los empresarios?
Así es. Una comunidad que cumple con sus objetivos de deuda y de déficit da confianza. El éxito de Madrid es la confianza en el empresario, la estabilidad jurídica, la colaboración público-privada sin complejos y el respeto por la iniciativa privada, gracias a la cual se mantienen los mejores servicios públicos.
‘The Economist’ ha dicho que la política de impuestos ha contribuido a que Madrid tenga uno de los ratios de crecimiento más importantes de España…
Muchas capitales europeas están empezando a mirar a Madrid con admiración y saben que o es libre o no será Madrid. Este concepto de comunidad segura, atractiva, con oportunidades, con una buena gastronomía, un buen clima, donde la gente puede vivir a su manera, a la madrileña, es muy seductor y ahí están los datos de crecimiento.
Bueno, Madrid también es el buque insignia del PP y muchos creen que usted intenta moverle el sillón a Pablo Casado…
Decir que quiero moverle el sillón a Casado es tener ganas de enredar. Pablo está tremendamente orgulloso de la gente en la que ha confiado, como es mi caso. Sabe que soy una persona muy independiente, muy crítica, y a la que no se le pueden imponer las cosas. Y mientras eso no suceda, vamos bien.
Vamos, que no hay choque de trenes entre Génova y Sol…
La política, desde que se acabó el bipartidismo, al que sin duda volveremos, es cada vez más cambiante. La locomotora del PP es Pablo Casado, y ahora temporalmente estoy yo al frente porque son unas elecciones de Madrid, y luego volveré a un vagón secundario.
Dígame tres medidas que va a poner en marcha que no haya hecho ya si gobierna…
Para mí la educación es uno de los pilares más importantes de mi Gobierno. Vamos a reforzar el bilingüismo en la etapa de 3 a 6. En Sanidad tenemos varios proyectos, ya no solo para las personas afectadas por la pandemia, sino para expacientes de Covid que hayan tenido secuelas, mayores y dependientes. Y luego está toda la reforma del IRPF de la que hemos hablado.
¿Y va a estar vigilante para que el reparto de los fondos europeos se haga con equidad?
Por supuesto que vamos a estar vigilantes. No vamos a tolerar que Pedro Sánchez le quite a Madrid lo que le corresponda y si es preciso pediremos amparo a instancias europeas, como hemos tenido que hacer en otras ocasiones.