El último bono de España a 50 años pierde un 9% y es el nuevo ‘matador’
Se colocó a un 1,45% y ya rinde un 1,72%
La deuda a largo plazo trae del pasado los bonos matador, conocidos así en Europa desde finales de los 80 por el riesgo de la peseta, aunque en este caso caen por precio, por la expectativa de mayor inflación y crecimiento económico.
El Tesoro Público de España emitió en febrero 5.000 millones de deuda con vencimiento a 50 años para aprovechar las (casi) inmejorables condiciones de financiación que existen actualmente gracias a la presencia récord del BCE en el mercado, como respuesta a la crisis del Covid.
Este bono se colocó a un interés del 1,45%, mínimo histórico para este plazo y en apenas unas semanas ya pierde cerca de un 9% por precio y el rendimiento en el mercado secundario se ha elevado hasta el 1,72% (las ventas reducen el precio de mercado y suben el interés).
Este pésimo comportamiento responde a las mejores perspectivas económicas, para el crecimiento y la inflación, en los próximos años, por el mayor ritmo en la vacunación y las esperanzas de que el verano sea un punto de inflexión.
Unas pérdidas en poco tiempo que traen del pasado el recuerdo de los bonos matador, como se conoció en Europa desde finales de los 80 a la deuda española para extranjeros en la que se asumía el riesgo de la peseta a cambio de elevados intereses a largo plazo. Pero en esta ocasión no se trata de un fenómeno únicamente español. El bono a 50
años que colo
‘Cornadas' en el mercado de deuda de la eurozona