Madrid vuelve a dar buen ejemplo
El Gobierno madrileño se sitúa a la vanguardia en España al adoptar las políticas que una crisis como la actual exige
Isabel Díaz Ayuso revalida su mandato como presidenta de la Comunidad de Madrid anticipando el cumplimiento de una de las promesas clave para su contundente victoria electoral de mayo. El próximo Gobierno regional realizará la histórica reducción del IRPF que supondrá, para todos los niveles de renta, un ahorro de casi 100 euros por ciudadano. En paralelo, impulsará una Ley de Defensa de la Autonomía Financiera como blindaje para las bonificaciones de Patrimonio y Sucesiones. Madrid lleva años demostrando que las rebajas fiscales son perfectamente compatibles con una alta recaudación y con la solidaridad, ya que, muy lejos del dumping tributario, es el mayor contribuyente a los fondos de ayuda interterritoriales. Ahora también evidenciará que el menor esfuerzo impositivo se conjuga con las políticas sociales de gran alcance (en especial, la ayuda de 14.500 euros por cada hijo para las madres menores de 30 años) y las inversiones en infraestructuras y sostenibilidad. En total, el nuevo Gobierno movilizará 1.400 millones en dos años para impulsar la recuperación y se convierte en pionero en España a la hora de aplicar las políticas que la crisis exigen, y que llevan meses desarrollándose en Francia, Alemania o Italia. Ofrece así un claro contraste con autonomías como Cataluña, donde las alzas fiscales aprobadas en 2020 seguirán vigentes en 2021 al renunciar el Govern a elaborar Presupuestos este año. Es más, Madrid también se desmarcará de la estrategia dominante del Plan de Recuperación del Gobierno central, cimentada igualmente en subir impuestos y más gasto corriente. El impulso a la recuperación, sin embargo, requiere las medidas opuestas: menos esfuerzo tributario e inversiones productivas.