EL ‘AVE’ BATE MÁXIMOS HISTÓRICOS CON LOS NEXT GENERATION
El despliegue de kilómetros en las redes de alta velocidad se eleva a máximos, al igual que las concesiones de obra pública de Adif Alta Velocidad, que lo hace al calor de los fondos europeos de la recuperación
La inversión en alta velocidad ha sido prioritaria para España en los últimos 30 años. Prueba de ello es que la red ferroviaria del país, la más extensa en Europa y la segunda en todo el mundo, solo por detrás de la de China, cuenta ya con más de 4.000 kilómetros desplegados, con la previsión de que la cifra siga en aumento al calor de los fondos de la recuperación, conocidos también como Next Generation. El dinero que Europa destina en esta modalidad para este año asciende a 749,6 millones de euros, lo que suma un total de 1.932 millones en los dos últimos años. Todo este oxígeno llena el pulmón del gestor de las infraestructuras ferroviarias, que trasladará parte de los fondos a través de distintos concursos públicos.
El efecto multiplicador del esfuerzo inversor de la administración y el impulso de los fondos comunitarios han llevado ya a España a contar con una extensa red que, además, con la liberalización del mercado en alta velocidad y la consiguiente entrada de dos operadores, ha aumentado la explotación de la red al máximo, superando al cierre de año el uso que la red tenía en 2019, es decir, antes de la pandemia.
Los incrementos más relevantes en la red se han producido en los tráficos de Larga Distancia y, aunque en menor medida, también en el tráfico de Cercanías e interurbanos, cuyo aumento fue del 6,4%. Por ejes ferroviarios, en las líneas de alta velocidad (LAV) destaca el crecimiento de Madrid-Levante, una de las líneas que ya cuenta con tres operadores y cuatro marcas comerciales (AVE, Avlo, Iryo y Ouigo).
Actuaciones pendientes
Las inversiones contempladas por Adif para los próximos años pivotan entre la construcción de plataformas, el montaje de vía, su electrificación, la implementación de los sistemas de señalización y control del tráfico. También la apuesta por el fomento del transporte multimodal y el trasvase de tráfico, un fenómeno que se traduce en grandes proyectos como la conexión del tren de alta velocidad con el aeropuerto Madrid-Barajas Adolfo Suárez, el de mayor capacidad en toda España y el principal de carácter internacional, o la unión entre la estación de Madrid-Chamartín-Clara Campoamor a través del nuevo túnel pasante.
El fin último de esta infraestructura es abrir la puerta a la circulación de trenes de alta velocidad uniendo las ciudades del norte y del noroeste del país con ciudades del sur de forma directa, sin necesidad de realizar parada o cambios de tren en la capital.
No obstante, para igualar a todos los territorios del país quedan importantes inversiones que ejecutar en algunos ejes. Entre las actuaciones en desarrollo está la Y Vasca, un corredor que no solo unirá a las capitales de la región (Vitoria, Bilbao y San Sebastián) a través de la alta velocidad, sino que también la conectará con Pamplona a través del Corredor Navarro.
Sobre este último corredor, el Ministerio de Transportes avanza que espera que está finalizados cinco de los siete subtramos del trayecto Castejón- Comarca de Pamplona, cuyos 87 kilómetros serán la espina dorsal de este corredor. Para ello será necesario la puesta en marcha de dos obras: la del Viaducto sobre el río Ebro (tramo I del subtramo 0), pendiente de adjudicación, y la de Tafalla Campanas, cuya obra se licitará a mediados de año. La inversión en ambos tramos se acerca a los 310 millones de euros, con financiación europea de los fondos.
La lista de tareas pendientes no finaliza aquí. Se necesita completar la conexión de los corredores del Mediterráneo y el Atlántico y se están realizando mejoras en la línea Madrid-Córdoba y la Madrid-Sevilla. También está pendiente la conexión de León con Asturias, que presenta un gran desafío técnico debido a la complejidad de la Cordillera Cantábrica. Además, se está trabajando en la mejora de la alta velocidad en Extremadura, con la inauguración del primer tramo entre Plasencia y Badajoz este verano.
Las cifras de contratación también reflejan el boom en la alta velocidad. El ferrocarril en España ha experimentado otro récord histórico en este sentido impulsado por los fondos Next Generation. Según los datos provisionales de la patronal de las grandes constructoras Seopan, el gestor ferroviario Adif adjudicó en el último ejercicio un total de 3.890,8 millones de euros, de los que el 47% (1.828,5 millones de euros) fueron para Adif Alta Velocidad. El resto fueron para Adif-red convencional, que rubricó contratos por 2.062,3 millones.
Años atrás, el peso del AVE era sustancialmente mayor, lo que demuestra la apuesta inversora del Gobierno por mejorar las líneas de Cercanías. De hecho, la estrategia indicativa del Gobierno hasta 2026 rebaja el protagonismo de la alta velocidad respecto a planes anteriores. En cualquier caso, Transportes maneja dos escenarios para el negocio de viajeros en media y larga distancia, con porcentajes de actuación que, en ningún caso, representarán menos del 49% del total. El resto de partidas contempladas son Cercanías y movilidad urbana, por un lado, y mercancías, por otro.
La LAV Madrid- Levante destaca en el crecimiento entre los principales corredores
También se contemplan actuaciones transversales.
560 millones en cánones
Con motivo del mayor uso de la red, Adif ha logrado en 2022 un ingreso de 562 millones en materia de cánones, las tasas que pagan
los operadores por utilizar su infraestructura. Las últimas cuentas del operador revelan un aumento significativo respecto al dinero percibido el pasado año por el mismo motivo (390 millones de euros). Estas tasas cánones se dividen entre el uso de la infraestructura, donde se introducen distintos conceptos (adjudicación de capacidad o utilización de las vías ferroviarias), y por el uso de estaciones y otras instalaciones, como los cambiadores de ancho. En cualquier caso, el nivel máximo de ingresos de 2022 de Adif AV sigue lejos del ejercicio récord de 2019, cuando logró 611 millones a través de la liquidación de cánones. En el resultado ha influido la propuesta avalada por la Comisión Nacional del Mercado de la Competencia para mantener congeladas esas tasas con la meta de facilitar la recuperación de tráficos en un momento de subida de costes energéticos.
Adif AV ha acaparado el 47% de las concesiones de obra pública
Adif congeló sus cánones en 2022 y 2023 para favorecer la recuperación del tráfico
Puertos del Estado supera los 563 millones de toneladas y sus ingresos mejoran a los prepandemia. Para 2023 hay una asignatura por cumplir: recuperar todo el tráfico de pasajeros.
Nivel de ingresos sin precedentes pese a que el tráfico portuario se quedase cerca de sus máximos históricos. Ese fue el balance de 2022 en los puertos españoles, que registraron un aumento del 3,5% en el movimiento de toneladas, alcanzando un total de 563,3 millones de toneladas movidas, cifra que se debe a los elevados volúmenes de los productos energéticos y en los cambios en el tablero que introdujo la guerra entre Ucrania y Rusia.
Los graneles sólidos, como el carbón y el coque de petróleo, aumentaron en un 10,8%, mientras que los líquidos, como el gas natural, lo hicieron en un 7%. Su subida compensó la contracción en los tráficos de contenedores que impidió batir la cifra más alta en la serie histórica, la del año 2019, que fue de 564,5 millones de toneladas.
Pese a las buenas noticias, la amenaza de crisis en algunas de las principales economías mundiales y la persistencia del conflicto entre Rusia y Ucrania plantean nuevos desafíos.
“Los principales puertos europeos como Rotterdam, Amberes y Hamburgo, también se vieron afectados por el estallido de la guerra, rebajando algunos de los tráficos procedentes de Rusia y el volumen de mercancía contenerizada”, explica Ocean Infrastructures Management (OIM), la división de consultoría de Ocean Capital Partners.
Si se analiza la actividad portuaria en España, el resultado fue desigual. Entre las entidades destacadas emergió Cartagena, que no solo batió su propio récord, sino que se colocó en el top 5 de puertos españoles con 36 millones de toneladas transportadas y desembarcó a Bilbao y Tarragona. El puerto vasco no alcanzó cifras prepandemia -aunque creció un 5%- y el catalán perdió 1,5 millones de toneladas entre 2021 y 2022.
Las tres principales posiciones, sin embargo, siguen inamovibles, con Barcelona, Valencia y Algeciras en lo más alto del podio. Estas infraestructuras, que a lo largo de los años han ido ampliándose para absorber la nueva demanda (la dársena Sur en Barcelona, las Norte y Sur en Valencia o el muelle Juan Carlos I e Isla Verde exterior en Bahía de Cartagena), acaparan la mitad de todo el tráfico portuario en cada ejercicio.
Con una exposición al coronavirus mucho más clara, los pasajeros de cruceros volvieron a los puertos y se recuperaron con fuerza. Pero todavía tienen un largo recorrido en este 2023, después de que el tráfico aumentara a triple dígito -llegó a los 8,2 millones de cruceristas- y siguiese aún así sin alcanzar la marca histórica de 2019. La subida fue muy relevante tras la apertura de la frontera con Marruecos. “Se espera que crezcan estas cifras este como consecuencia de la reducción casi total de restricciones de movilidad”, vaticinan desde OIM.
“La importancia de esta industria en nuestra economía queda reflejada al obtenerse durante ese año, una facturación de casi 6.000 millones de euros, aportando 2.800 millones de euros al PIB nacional, y más de 50.000 puestos de trabajo”, destacan desde Puertos del Estado.
La esperanza se deposita en algunas tendencias que ya se confirman, como que los principales puertos crucerísticos en los meses de invierno (los de las Islas Canarias, Barcelona y Baleares) arrojan cifras prepandemia en los primeros 60 días del curso.
Destaca por encima del resto el caso canario, cuya temporada alta coincide precisamente con estos meses y que en este periodo en 2023 superan su mejor marca histórica. De confirmarse las expectativas, los puertos españoles pasarían alrededor de 11 millones de cruceristas (un 4,7% más que el máximo histórico, de 2019, con 10,5 millones de cruceristas), una vez más con los puertos de Barcelona, Baleares y Canarias liderando el sector.
Arranque de 2023
Durante los dos primeros meses de este año, el conjunto de puertos españoles de interés general registró una disminución del 4,1% en el movimiento de mercancías, alcanzando un total de 84,7 millones de toneladas, de acuerdo a los datos de Puertos del Estado y la recopilación elaborada por la patronal Anave, lo que arroja un retroceso en 3,6 millones de toneladas en el arranque de año.
La carga transportada en contenedores y los graneles sólidos disminuyeron en un 11,4% y un 2,3% respectivamente, mientras que los graneles líquidos aumentaron un 0,9%. La mercancía general convencional se mantuvo en niveles similares al año anterior, con un aumento del 0,1%. Los tres principales puertos españoles registraron un descenso en el movimiento de carga debido a la disminución del transporte en contenedores. Por otro lado, los puertos de La Coruña, S.C de Tenerife y Huelva mejoraron significativamente desde el año pasado.
Ingresos récord
Pese a que el tráfico de mercancías no alcanzó las cifras prepandemia, en 2022 el sistema portuario español registró un importe neto de cifra de negocio de 1.190 millones de euros, lo que supone un aumento del 11,5% respecto al año anterior. Este resultado su
Los dos meses acumulados de 2023 registran una contracción en el movimiento de mercancías