España tiene casi 50.000 empresas ‘zombis’, la mitad en la construcción
Se popularizaron en la crisis de 2008 y tomaron impulso durante la pandemia
En España existen actualmente 48.000 empresas zombis, un término que comenzó a popularizarse en la crisis de 2008, y que cobró aún mas protagonismo durante la pandemia por coronavirus. Casi 50.000 sociedades que han presentado al menos dos ejercicios consecutivos en los que sus resultados operativos fueron insuficientes para cubrir los compromisos derivados de su endeudamiento financiero.
Los datos los aporta un informe de la empresa de crédito y caución Iberinform, que vaticina que “cabe esperar que el endurecimiento progresivo de los tipos de interés, iniciado en 2022, provoque un incremento paulatino de este censo en empresas altamente vulnerables”.
Como explican en la consultora, “una empresa zombi es aquella que presenta una rentabilidad baja o incluso negativa, y es incapaz de hacer frente a los costes financieros que conlleva la devolución de sus deudas a corto y medio plazo. Estas empresas, altamente vulnerables, logran sobrevivir en el mercado mediante la refinanciación continua de su deuda”.
En Iberinform advierten de que “su existencia puede llegar a condicionar el desarrollo de una economía, ya que, en el largo plazo, tienen un futuro incierto; multiplican en su actividad con el resto del tejido productivo los riesgos de impago, y, además, la prolongación de esta actividad impide que los recursos se reasignen a empresas eficientes”.
Uno de los factores que evita que estas empresas se sienten a renegociar con sus acreedores financieros es el tamaño, aunque el estudio muestra que el fenómeno de las empresas zombis se da en todos los segmentos de actividad. No obstante, casi seis de cada diez son microempresas (57%); tres de cada diez son pequeñas; el porcentaje de medianas empresas es del 9,2%, y el de grandes empresas el 3,9%.
Por sectores de actividad, el mayor número de empresas zombis se encuadra en el de la construcción y la actividad inmobiliaria (22% del total), seguido por el comercio (21%) y la industria manufacturera (14%).
En cuanto a su distribución territorial, casi la mitad de las empresas vulnerables se concentra en las regiones de Madrid (21%), Cataluña (19%) y Valencia (10%), en línea con el mayor nivel de actividad empresarial de estas comunidades autónomas. Le siguen Andalucía, (9,9%), Galicia (6,7%), País Vasco (6,0%) Castilla y León (4,3%), Aragón (4,1%), Canarias (3,7%) y Castilla-La Mancha (3,2%).
Apoyo ICO ‘artificial’
El economista Javier Santacruz precisa que cuando se llama zombi a una empresa “es porque se mantiene artificialmente con vida después de un proceso de reestructuración de su deuda, con intervención bancaria, que intenta salvar la compañía cuando, tanto el modelo de negocio, como también la propia gestión de la empresa, o están muertos o están a punto de serlo”.
Santacruz refiere que, “precisamente, la consecuencia esencial de casi dos años de moratoria concursal ha sido la aparición de empresas zombis, en su mayor parte sostenidas artificialmente con los créditos avalados por el ICO durante la pandemia. Créditos, por otra parte, que no tienen capacidad de resolver”.
“En este sentido”, razona este experto, “la proliferación de empresas zombis cuestiona uno de los objetivos básicos de la reforma de la Ley Concursal, la cual es mucho más favorable a la hora de mantener a flote las empresas que tienen problemas (haciéndolo más sencillo, flexible, y permitiendo el tiempo necesario de acuerdo entre acreedores durante la fase preconcursal), pero que puede tener una consecuencia negativa no buscada, como es la salida de muchas empresas, tanto de la fase preconcursal como del concurso, manteniéndose en el tiempo de manera zombi”. Hacienda modificó, tras el Real Decreto aprobado el 4 de abril, el reglamento General de Desarrollo de la Ley Tributaria y evita la expansión de estas empresas.