Los contratos indefinidos pierden estabilidad tras la reforma laboral
Los despidos con contrato ‘premium’ crecen un 162% en los últimos doce meses
La reforma laboral ha rebajado en tiempo récord las tasas de temporalidad del mercado de trabajo, pero el Banco de España señala que el nuevo marco regulatorio está teniendo un impacto en varias dimensiones. Los economistas de la institución han puesto el acento en los efectos sobre la contratación y en cómo se ha disparado los despidos entre los puestos de trabajo con contrato indefinidos. No solo tiene que ver con que los fijos discontinuos han ganado peso dentro de la contratación indefinida, los puestos de trabajo con un contrato ordinario tradicional también han quedado más expuestos a un despido.
En un mercado de trabajo marcado por la volatilidad, firmar un contrato indefinido se ha considerado históricamente el sinónimo por excelencia de la estabilidad laboral y económica. Por ello, el objetivo de la reforma laboral aprobada a finales de 2021 era impulsar su firma y reducir la de los temporales. Aunque ambos objetivos se han cumplido, más de un año después cada vez más expertos llaman la atención sobre los indicios que demuestran que la calidad de los empleos, supuestamente de mayor calidad, empeora.
En su Informe Anual el Banco de España recalca que la disminución de la tasa de temporalidad, por sí sola, “no es suficiente para valorar de manera global los efectos” de la nueva norma, y se debe tomar en consideración su impacto “en múltiples dimensiones”, es decir, sobre el empleo, el paro, los salarios, la productividad y otros agregados macroeconómicos clave, como el consumo y el ahorro de los hogares.
Por ejemplo, el supervisor incide en que, ante una mayor percepción de estabilidad en el empleo, los nuevos trabajadores con contratos indefinidos en 2022 podrían haber reducido su ahorro por motivo de precaución, lo que habría dado como resultado una “aceleración transitoria en el ritmo de avance del consumo agregado” durante el año pasado. Sin embargo, otros efectos no son tan positivos.
Aunque considera que con los datos disponibles “no es posible realizar todavía una evaluación global y rigurosa de la reforma laboral”, también incide en que se pueden haber producido otros efectos indeseados en la contratación. Así, recoge que, aunque la tasa de temporalidad se ha reducido en más de 8 puntos porcentuales, en 2022 se ha producido un “aumento significativo de las salidas al desempleo desde empleos indefinidos”. Una tendencia que se ha prolongado en el primer trimestre del año.
El organismo que dirige Pablo Hernández de Cos se suma de esta forma a las advertencias formuladas por servicios de estudios como Fedea y BBVA Research, que han advertido que se está produciendo un “retroceso en la supervivencia de los empleos fijos” respecto a la situación previa a la norma. En otras palabras, los expertos temen que las nuevas reglas del juego a medio y largo plazo supongan una caída en la contratación
El Banco de España pone el foco en las “transiciones al desempleo” de esta fórmula contractual
indefinida y a tiempo completo. La gran crítica a la reforma laboral es que ha propiciado el auge de una tipología de contrato indefinido, que anda a mitad de camino entre los contratos temporales e indefinidos, al ser lo suficientemente flexible para aceptar ceses temporales en la actividad del trabajador, pero sin contar en las estadísticas como baja en la Seguridad Social.