Menores ingresos pero con una tendencia trimestral alcista
Vodafone España ha ingresado por servicios 875 millones de euros, lo que representa una reducción interanual del 3,7% en su cuarto trimestre fiscal (enero a marzo). Pese a las menores ventas, la teleco ha iniciado la remontada con mejora en la evolución de su facturación respecto al tercer trimestre (-8,7%), con cinco puntos porcentuales de mejora. En el conjunto del ejercicio, la teleco ha reducido sus ingresos por servicios el 5,7% respecto al curso anterior, con un total de 3.514 millones. La rentabilidad se ha mantenido estable (-1,1%) con un total de 975 millones y una mejora del margen de ebitda de 1,3 puntos porcentuales, todo ello marcado por un entorno de feroz competencia, especialmente en el bajo precio, con menores clientes y mayores costes de la energía. Todo lo anterior fue compensado parcialmente por la compañía con la puesta en marcha de “eficiencias en la gestión de los costes y la recuperación de tasas de impuestos y fiscalidad”, según ha explicado el operador a través de un comunicado.
Entre todas las novedades con impacto en el negocio,el grupo ha destacado “la vinculación de las tarifas al IPC, así como la simplificación de los procesos y otras eficiencias en costes”. La teleco igualmente ha apostado por la fidelización de la clientela, reflejado en la reducción churn (tasa de desconexión) y el lanzamiento del nuevo portafolio de tarifas simplificado y de nuevos productos como Hogar 5G o Vodafone Energía, salud o seguros. A finales del pasado marzo, la base de abonados de contrato móvil se ha reducido en 36.000 clientes, tras 123.000 desconexiones de SIM temporales proporcionadas a escuelas y universidades.
Con todo lo anterior, la cifra de clientes de móviles se ha situado en 11,1 millones de accesos. Por su parte, los suscriptores de banda ancha fija han menguado en 121.000 clientes, para fijar la cifra en 2,9 millones, mientras que el negocio de la televisión de pago sufrió bajas de 56.000 clientes, hasta 1,5 millones. En línea con la tendencia alcista del operador sobresale la base de líneas activas IoT conectadas, que se han incrementado en 1 millón en un año, hasta los 5 millones en España, para así acaparar el 40% de la cuota.