Escrivá atraerá jóvenes inmigrantes ante la caída de su afiliación
El ministro de Seguridad Social busca frenar el envejecimiento del mercado laboral
La recuperación del empleo tras la pandemia ha venido acompañada de un intenso repunte de la ocupación entre los inmigrantes, que alimenta la esperanza en el Gobierno de que los cotizantes foráneos sean uno de los pilares que garanticen el sistema de pensiones frente al envejecimiento de la fuerza laboral nacida en España. Pero esta previsión tiene un problema: estos trabajadores inmigrantes también envejecen. De hecho: el porcentaje de los extranjeros menores de 35 años ha retrocedido en 11,5 puntos en la última década, más del doble de lo que ha descendido el mismo dato para los españoles.
Desde marzo de 2020, la ocupación de los inmigrantes ha crecido un 20%, cuatro veces más que la de los españoles, y alcanzan los 2,5 millones de afiliados medios, un récord histórico para todos los meses de marzo de la serie histórica, que se remonta a 2007. Aunque esta cifra solo supone un 12,4% del total de los afiliados medios, aportan el 32% del empleo neto creado desde la crisis sanitaria.
Un dinamismo que contrasta con el inédito repunte de las vacantes de empleo precisamente en sectores muy dependientes de la mano de obra extranjera, como la agricultura, la hostelería o la construcción. El problema es que, pese a estas cifras, son un récord solo a nivel nacional. Si se compara con nuestros vecinos, España se sitúa a la cola de la UE y la OCDE en ratio de vacantes por desempleado, lo que amenaza por desatar una guerra por atraer trabajadores foráneos.
En este escenario, el plan del ministro José Luis Escrivá, que concentra las competencias en materia de pensiones y migración, es flexibilizar las condiciones para atraer inmigrantes, ya sea mediante la vía de fomentar las contrataciones en origen o establecer facilidades para que los que vienen por su cuenta puedan acceder al mercado laboral. El último movimiento en esta línea ha sido elaborar una nueva instrucción sobre los requisitos de formación a los extranjeros para incorporarse al mercado
El aumento de edad de los inmigrantes también afecta a la natalidad. Lo cierto es que los inmigrantes llegados en la primera década de 2000 tuvieron un efecto beneficioso no solo en las cotizaciones, sino en la natalidad. Sus hijos han permitido que entre 2019 y 2022, se “frene por primera vez en lustros” la caída registrada entre los jóvenes que se incorporan al mercado de trabajo, según apuntaba en un reciente estudio el investigador de Fedea, Florentino Felgueroso. laboral, que rebaja las exigencias inicialmente previstas en la normativa que él mismo presentó hace seis meses.
Con ello intenta también, en parte, responder también a la crítica recurrente de Europa por el exceso de burocracia de España a la hora de reconocer las competencias de los trabajadores foráneos, lo que les condena a los puestos peor pagados y más precarios.
El plan del ministro comparte la filosofía de fondo de la de las medidas migratorias impulsadas por el Gobierno del PSOE en 2005, y que contribuyeron a nutrir de cotizantes a la Seguridad Social. Pero con un menor alcance por el elevado paro actual, cercano al 13%.