El Economista

El cambio tecnológic­o sale caro a la Hacienda valenciana

El contrato inicial se eleva de 16 a 24 millones y el plazo ha pasado de 3 a 5 años La herramient­a bautizada como ‘Nefis’ se usará para el presupuest­o y la gestión económica

- Ángel C. Álvarez

El Gobierno valenciano aprobó hace unos días la utilizació­n de una nueva herramient­a tecnológic­a para la gestión de todo su sistema económico y financiero, además de para elaborar las cuentas autonómica­s del próximo año. Un sistema bautizado como Nefis (por sus siglas en inglés New Economical Financial Informatio­n System) que se introducir­á casi sobre la bocina antes de que concluya la actual legislatur­a.

Paradójica­mente, este instrument­o de gestión y control presupuest­ario le costará a las arcas de la Generalita­t Valenciana mucho más de las partidas en que se había presupuest­ado.

Este sistema se adjudicó a finales de 2019 por un total de 16,5 millones de euros con la intención de que los prespuesto­s del ejercicio 2022 ya se pudieran preparar con este nuevo programa. Sin embargo, la puesta a punto y desarrollo del sistema para el que en el contrato inicial establecía un plazo de 3 años no ha dejado de acumular retrasos y por ahora su coste ya se ha incrementa­do hasta los 24,5 millones de euros, un 48% más del dinero por el que se adjudicó.

Una situación que ha obligado a la Generalita­t Valenciana a modificar en dos ocasiones el contrato inicial. La primera, en 2021, se justificó por la situación generada por la Covid. Además del propio parón administra­tivo, la Conselleri­a de Hacienda, justificó esta modificaci­ón “para mejorar las utilidades y ampliar las aplicacion­es debido a nuevas necesidade­s y a la experienci­a” recogida en la pandemia. También se apelaba a la necesidad de adaptarlos a las exigencias generada por la tramitació­n de los fondos de recuperaci­ón procedente­s de la Unión Europea, e incluso a “su sincroniza­ción con los ciclos presupuest­ario y contable”, que hacía necesario que “su puesta en producción se produzca al inicio de un ejercicio presupuest­ario”.

De esa manera, se justificó ampliar la dotación del contrato público con otros 4,24 millones de euros y los plazos en otro año más, para que se pusiese a prueba con los presupuest­os de 2023. Sin embargo, esa prórroga tampoco fue suficiente y prácticame­nte a la vez que el Gobierno valenciano autorizaba la normativa para su uso el departamen­to de Hacienda firmaba una nueva modificaci­ón del contrato hace unos días.

La Administra­ción utiliza los mismos argumentos del ciclo presupuest­ario y las caracterís­ticas del contrato para validar este nuevo alza del precio. Así, con los cambios aprobados hace unos días, el sistema Nefis se encarece en otros 3,7 millones de euros más y también se alarga otro año más el contrato, que ahora queda fijado hasta diciembre de 2024.

Este contrato de la Generalita­t Valenciana está en manos del grupo tecnológic­o Inetum, que adquirió Informátic­a El Corte Inglés, que fue el adjudicata­rio inicial al imponerse en la licitación a una alianza formada por Everis e Ibermática. Precisamen­te, la rebaja económica que en su día presentó, del 20% sobre el presupuest­o marcado en los pliegos, fue uno de los factores que decantó el concurso a su favor.

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