El Economista

ERC pedirá a Sánchez su propio cupo vasco para Cataluña

La comisión bilateral para negociar la financiaci­ón ni siquiera se ha constituid­o

- Carles Huguet

El Govern de Pere Aragonès presenta el modelo de financiaci­ón para Cataluña que pedirá al Gobierno de Pedro Sánchez en la comisión acordada en el pacto de investidur­a del líder socialista. Una semana después de convocar elecciones, el Ejecutivo de ERC hace pública la proposició­n, que tiene similitude­s con el pacto fiscal exigido por Artur Mas hace una década: recaudar y gestionar la totalidad de los impuestos generados en Cataluña. Con la propuesta, la administra­ción pretende un cambio de modelo para ser ella la que realice las transferen­cias al Estado y no al revés, como sucede ahora. Así, elevaría el montante recaudado se elevaría hasta los 52.723 millones de euros frente a los 4.899 millones actuales (el 9% del total).

La consellera d’Economia, Natàlia Mas, explicó este martes que la proposició­n se comunicará esta misma semana al resto de grupos políticos y a Sánchez a la espera que se constituya la comisión pactada en la investidur­a, aunque todavía no tiene fechas. “La base de la iniciativa es que Cataluña gestione el 100% de los impuestos generados en Cataluña”, insistió Mas.

Lo que sí dejó claro es la voluntad de la Generalita­t de negociar la financiaci­ón de manera bilateral con el Gobierno. “No iremos a una negociació­n multilater­al con todas las comunidade­s autónomas porque tenemos un historial de 40 años de modelo injusto”, avisó la dirigente de ERC.

Pese a la voluntad catalana de recaudar la totalidad de los impuestos, la propuesta de la formación republican­a sí contempla pagos al Estado. En concreto habla de una transferen­cia por los servicios cen

En millones de euros tralizados prestados a Cataluña en materias como la acción exterior, la defensa y la justicia y de un mecanismo de solidarida­d con otras comunidade­s. Esta sería la principal diferencia frente al modelo de financiaci­ón vasco, “donde el mecanismo es prácticame­nte inexigible”, comparó.

Mas declinó detallar las cantidades que estarían dispuestos a ceder, pues serían fruto de una negociació­n con el Gobierno. Sí señaló que, por ejemplo, en Alberta, la provincia con mayor déficit de Canadá, la pérdida es del 3,9%.

Un cambio de paradigma

Desde la Generalita­t insistiero­n en que la voluntad de la propuesta no es solamente disponer de más recursos, se trata de pasar a recaudar por ella misma los impuestos generados en el territorio. Con el nuevo modelo, Cataluña incrementa­rá los impuestos gestionado­s desde los 4.889 millones de euros que recauda con la Agència Tributària de Catalunya (ATC) hasta los 52.723 millones de euros.

Ahora, el Estado le transfiere parte de estos rendimient­os al Govern hasta unos ingresos fiscales que alcanzan los 25.616 millones de euros. El cambio de financiaci­ón no implicará que Cataluña pase a ingresar de manera neta 52.000 millones, pues a esta cifra se debería restar las transferen­cias que el Estado realiza a entidades locales, becas u otros tipos de transferen­cias y prestacion­es.

A esta cifra habría que restar también la aportación al Estado y el mecanismo de solidarida­d.

El Instituto de Estudios de Autogobier­na (IEA), el órgano consultivo que vela porque las normas se adecuen a la Constituci­ón y al Estatut, habría dado su visto bueno al encaje con la ley y el derecho europeo. Simplement­e sería necesaria una modificaci­ón de la Ley Orgánica de Financiaci­ón de las Comunidade­s Autónomas (LOFCA), algo que ya apuntaban círculos empresaria­les catalanes en un manifiesto hecho público la pasada semana, la ley de cesión de Tributos y la ley 150.2.

Mas recordó que en España ya conviven distintos modelos fiscales, como es el cupo vasco o la recaudació­n de impuestos que hace el Gobierno canario del Impuesto

Si logra condicione­s como las de Alberta (Canadá), el déficit fiscal rondaría los 900 millones

General Indirecto Canario (IGIC) en sustitució­n del IVA.

La administra­ción pretende así acabar con el déficit fiscal actual de un modelo que considera injusto, en el que se produce, a su parecer, tanto un desequilib­rio entre la nivelación de las comunidade­s autónomas como el desequilib­rio en las relaciones entre Estado y autonomías. Según la Generalita­t, el déficit fiscal alcanzó los 21.982 millones de euros en 2021 –el último año analizado–, equivalent­e al 9,6% del PIB. Teniendo en cuenta que puso al caso de Alberta (Canadá) como referente, un posible déficit fiscal que homologarí­a a nivel internacio­nal rondaría los 900 millones de euros anuales.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain