Daurella entierra el conflicto con sus sobrinos por el dividendo de Coca-Cola
Incrementa la remuneración a los familiares, que abandonan el camino judicial
La presidenta de Coca-Cola Europacific Partners, Sol Daurella, y sus sobrinos zanjan el enfrentamiento abierto durante la pandemia por los dividendos procedentes de la embotelladora del popular refresco. El conflicto, que terminó por llegar a la Corte de Luxemburgo, se desató cuando los hijos de Eva Daurella entendieron que eran remunerados de manera inferior a la que consideraban. Ahora, la empresaria ha incrementado los pagos y sus familiares han abandonado la vía judicial abierta.
El entramado a través del que Daurella controla su participación en Coca-Cola termina en Luxemburgo –aunque la sede fiscal de la sociedad está en España–. En la cabecera radicada en el Gran Ducado, controlada mayoritariamente por Sol, Eva tiene una participación minoritaria con la sociedad Daucobe. Dedicada desde hace años a la cría de caballos en la ciudad de Sevilla, son sus hijos –apellidados Bidón Daurella– los que gestionan los negocios.
Tras expresar su descontento con la política de remuneración y presentar una demanda al Tribunal del distrito de Luxemburgo, Sol respondió con un dividendo millonario durante el año pasado. La dirigente les distribuyó, exclusivamente para ellos, un dividendo de 2,18 millones de euros. Que se sumaron a los 1,19 millones repartidos de forma interina meses antes. En total, 3,37 millones de euros; la cifra exacta de beneficios que la sociedad en el país centroeuropeo registró.
A cambio, los sobrinos de Daurella abandonaron la vía judicial emprendida en febrero de 2021. Lo hicieron eso sí después de que en primera instancia se rechazasen sus argumentos, por lo que optaron por no presentar recurso a estadios superiores.
La familia da así carpetazo a un conflicto surgido entre 2019 y 2020. En el año previo al coronavirus, Sol aprobó un dividendo de 26 millones, del que no les correspondía nada. Los Bidón Daurella tenían un as bajo la manga: sus dividendos están blindados. En 2008, José Daurella, el padre de Sol y Eva, les cedió un porcentaje de la patrimonial luxemburguesa a pesar de dejar el control de la compañía en manos de Sol. Se aseguró eso sí que Eva y su familia podrían disfrutar de las ganancias generadas por el popular refresco.
El empresario incluyó una cláusula en los estatutos por la que Daucobe tendría el derecho a percibir anualmente el 7% del beneficio neto obtenido por Begindau SL, la cabeza del grupo en España. Así, los sobrinos de Sol Daurella pudieron hacer válido el anexo para cobrar sus derechos.
Un mes después de la demanda, la presidenta de CCEP en marzo aprobó un pago de 619.056 euros para sus familiares; ligeramente menos que los 866.678 euros de un año antes. Ahora, y con el fin de la vía judicial, el conflicto parece quedar aparcado de manera definitiva.
El dividendo de CCEP
El dividendo que llega a la cúpula del entramado patrimonial parte de la remuneración que Coca-Cola Europacific Partners aprueba en su consejo de administración. Y en 2023 fue una cifra récord. La compañía repartirá 1,84 por acción a cuenta de los resultados del año pasado, una cantidad histórica y el 9,5% más que los 1,68 euros por título de la campaña anterior.
El pago llegará tras haber ganado 1.669 millones de euros en 2023, el 9,5% más que en el año anterior. Además, mejoró sus ingresos un 5,5%. Saltaron desde los 17.320 millones de euros de 2022 a los 18.302 millones de euros. La empresa justificó el crecimiento por el esfuerzo en la contención de los costes, el incremento de las eficiencias y una política de precios que dio los resultados esperados.
Los Bidón Daurella tienen derecho a percibir el 7% del beneficio anual como pago