El Govern ausente
La ausencia de la Generalitat en la entrega del Premio Planeta la noche del pasado lunes ha sido el último plante de la Administración catalana en diversos actos políticos, sociales o culturales de relevancia, un hecho sin precedentes desde el restablecimiento de la autonomía. Ningún Gobierno como el de Quim Torra había dejado vacía la silla que le corresponde en reuniones de trascendencia, como el Consejo de Política Fiscal y Financiera, como ha ocurrido en tres ocasiones en unos meses.
El independentismo argumenta que lo que desea es una relación bilateral con el Estado y rechaza acudir a esos encuentros multilaterales o de “café para to- dos”, pese a la trascendencia que puedan tener para Cataluña los acuerdos que se adopten. Su apuesta son los encuentros de tú a tú con el Gobierno, como la Comisión bilateral Estado-Generalitat celebrada el 1 de agosto y que llevaba siete años sin reunirse. El ejecutivo de Sánchez se muestra dispuesto a reactivar estos foros, pero pide al Govern que no se ausente de otros en los que participan todas las autonomías.
Otra de las ausencias más sonadas de Torra en los cinco meses que lleva de presidente se produjo con motivo de una cumbre celebrada en Barcelona el 27 de septiembre sobre el corredor mediterráneo, una obra largamente reivindicada por el Govern, como por otras autonomías. A aquella cita acudieron más de 1.500 empresarios, directivos y profesiona- les de España, además del ministro de Fomento, José Luis Ábalos y el presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig.
Fuera del ámbito político, también sorprendió la ausencia de la Generalitat en la capilla ardiente instalada en Barcelona de la soprano Montserrat Caballé, aunque Torra sí acudió el pasado día 8, cuando se celebró el entierro. Igualmente fue significativa la ausencia del president y de cualquiera de sus consejeros en el entierro, el 29 de agosto, de Josep Fontana, el historiador catalán más leído en España y América Latina y uno de los más traducidos y conocidos el mundo anglosajón.
Fontana era un declarado marxista que cerró la lista de Ada Cola en las municipales de 2015 y Caballé siempre se reivindicó como española, lo que quizás puede ayudar a entender la ausencia.
La silla del Govern que quedó vacía en la entrega del último Premio Planeta adquiere aún más relevancia por la presencia de los expresidentes José Montilla y Artur Mas. Torra se ausentó, igual que la consejera de Cultura, Laura Borràs, quien inicialmente anunció que iría. Un portavoz de su departamento explicó que la ausencia nada tiene que ver con las declaraciones del presidente del grupo, José Crehueras, de no volver a ubicar su sede social en Barcelona. Planeta emplea a unas 8.000 personas, es el primer grupo editorial en castellano del mundo y engloba 170 editoriales, entre ellas una docena en catalán.