Unicef propone una prestación universal por hijo según la renta
Las familias en pobreza severa recibirían 150 euros al mes por niño La implantación de la medida supondría un gasto total de 68,6 millones de euros
Unicef propone la instauración de una prestación universal por hijo a cargo como la medida principal destinada a paliar la «difícil realidad» que, según el colectivo, viven los niños aragoneses en la actualidad y, sobre todo, para evitar que la situación actual se cronifique. Así, se establecerían tramos de ingresos familiares por debajo de los umbrales del 30%, 40% y 60% de la renta media aragonesa.
De este modo, las familias en situación de pobreza severa (con ingresos por debajo del 30% de la renta media –20.492 euros al año–) percibirían una prestación por hijo de 150 euros, mientras que las familias en pobreza alta (ingresos por debajo del 40% de la renta media) recibirían 100 euros al mes por niño. Las consideradas en pobreza moderada o en riesgo de exclusión (con ingresos por debajo en un 60% de la media) cobrarían 50 euros al mes por hijo y, por último, el resto de familias tendrían derecho a una prestación de 10 euros mensua- les que serían abonados en un solo pago anual o serían objeto de desgravaciones fiscales en la declaración del IRPF.
Según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), el 2,85% de los hogares aragoneses presenta ingresos por debajo del 30% de la renta mediana aragonesa, en los que residen 7.241 niños (el 3,22% de la población infantil). Un 2,48% de las familias registra rentas inferiores al 40% de la media en las que viven 6.543 menores de 18 años (el 2,8% del total) y un 17,23% de las casas presentan ingresos por debajo del 60% de la media, lo que equivale a casi 45.000 niños.
En total, la asignación de prestaciones en función de la renta obligaría a un desembolso de 48.067.800 euros, a los que habría que sumar la concedida a los hijos que quedarían fuera de los umbrales más bajos (algo más de 20 millones de euros). Así, la instauración de esta prestación universal supondría un total 68.669.880 euros. «Supondría aumentar el presupuesto anual del Gobierno de Aragón en torno a un 1,2%, lo que puede parecer inalcanzable en una coyuntura como la actual, pero si nos atenemos al gasto que la Administración autonómica dedicaba a los servicios públicos antes de la crisis, todavía estaríamos lejos de las cifras anteriores al 2010 incluso aumentando esos casi 67 millones de euros», expone el informe de Unicef. que asegura que este «no es un objetivo inalcanzable».
Así, el colectivo invita a Aragón a ser «la comunidad pionera» en la aplicación de esta medida «aunque fuera de forma progresiva, empezando por la infancia con mayor riesgo de exclusión». Su adopción, «a corto o medio plazo», supondría que «miles de aragoneses abandonaran la pobreza y el riesgo de exclusión». Las Cortes, de momento, dicen que es pronto para valorarlo.