Una asociación reivindica las mejoras para su resurgimiento
Las propuestas se centran en modificar el plan urbanístico y que llegue la luz y el agua La vía turística entre Colungo, Bárcabo y Naval puede abrir una opción de desarrollo
personas y fue cancelada este año, «Hay muy buena convivencia. Hay compatriotas que vienen de Bélgica solo para ese fin de semana», afirma Herman. También se festeja el Día de Bélgica en junio.
Sin embargo, la Asociación denuncia que el actual Plan de Ordenación Urbanística deja pocas opciones para actuar. La mayor parte del territorio, donde hay un coto de caza y plantaciones de trufa, son propiedad de los herederos de Joaquin García, fallecido hace alrededor de un año, y con los que se mantienen contactos. «Lo ideal sería poder adquirir parte de estas tierras o poder permutarlas por campos que tenemos aquí desperdigados pequeños propietarios», insta Matilde Grasa, de Casa del Herrero, una de las dos que no vendieron . Ahora, legalmente, solo es posible rehabilitar las viejas casonas, la gran mayoria hechas escombros. «Los belgas que vinieron ya son mayores. Por ahora se han ido vendiendo sus casas entre ellos, pero dejarán de venir por la edad. También ha habido españoles interesados, que han preguntado, pero con este vacío legal no es posible darles una oportunidad», reconoce David Olivera.
La asociación se queja de la inacción de algunas administraciones, el abandono histórico y la falta de inversión para poder facilitar los recursos básicos de luz y agua a los actuales vecinos y esenciales para poder repoblar Suelves. «Es un entorno apetecible para quien busque calma, sin ruido, sin granjas, sin tendidos electricos, cerca de Guara y el Pirineo», se lamenta Matilde Grasa,