El Ejército se desplegó en las comarcas más afectadas
La Unidad Militar de Emergencias (UNE), un servicio creado en el 2005 y que recibe un presupuesto aproximado de 31 millones anualmente, cuenta con cinco sedes en España, una de ellas en la Base Aérea de Zaragoza. De allí partieron el segundo fin de semana de enero dos convoyes que fueron a limpiar carreteras, caminos y pistas a las comarcas del Maestrazgo y del Campo de Daroca, dos de las zonas más afectadas por la borrasca. «En la capital aragonesa contamos con todo tipo de maquinaria, incluidas seis quitanieves, y somos autosuficientes», señala la brigada Raquel Ramiro. Esta unidad dispone de su propio equipo de transmisiones, trasladable, lo que aumenta su autonomía. Y es precisamente esa capacidad de desplazamiento la que hace que la UME pueda participar en misiones en cualquier punto de España y del extranjero. Sus vehículos tipo oruga, anfibios y todoterreno la hacen muy versátil, como ha demostrado en las riadas del Ebro del 2015 y del 2018. Recientemente, a raíz de la crisis del coronavirus, el 4º Batallón de la UME (el ubicado en Aragón) ha realizado dos misiones de gran importancia, una para desinfectar residencias y otros lugares sensibles y otra para formar a sus rastreadores con el fin de evitar la propagación de la enfermedad. Con todo, sus intervenciones más numerosas son en incendios forestales, inundaciones y, como en el caso de Filomena, en fenómenos meteorológicos adversos. ción Civil activó el protocolo para que interviniera la Unidad Militar de Emergencias (UME), que desplegó más de 200 hombres, en dos equipos, primero en el Maestrazgo y Daroca y, a continuación, en el Somontano del Moncayo, donde numerosos pueblos habían quedado prácticamente aislados al cubrirse de nieve sus vías de acceso.
Ni la UME ni el Cuerpo Nacional de Policía ni la Guardia Civil forman parte directamente de Protección Civil, pero estos cuerpos se activan siempre que la gravedad de la situación lo requiere, explica Carmen Sánchez, directora general del 112 del Gobierno de Aragón. El servicio de emergencias autonómico dispone de más de 800 efectivos de carácter voluntario y tiene a su disposición las policías locales y los bomberos de las distintas instituciones, así como la Unidad de Policía Adscrita.
Gran parte de los problemas desencadenados por el temporal se produjeron en la red de carreteras, donde el Gobierno central, la DGA y las diputaciones provinciales tienen competencias en función de la catalogación de la vía. Por eso fue fundamental el papel desarrollado por los equipos antiincendios de las diputaciones de Zaragoza, Teruel y Huesca, donde recientemente se ha creado un cuerpo de bomberos de ámbito provincial (SPEIS).
La nieve cayó en grandes cantidades en el Sistema Ibérico, que