Ruta por las trincheras de la guerra en Monegros
La presencia en Monegros de miles de contendientes de la guerra civil española durante casi dos años en un frente muy estable propició la construcción de todo tipo de fortificaciones y trincheras en el accidentado paisaje de la sierra de Alcubierre. Se trata de vestigios de la vida en el frente y de la resistencia en la retaguardia que se ponen ahora en valor con la primera Ruta de la Memoria.
El consejero de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de Aragón, Felipe Faci, junto a la directora general de Patrimonio Cultural del Gobierno de Aragón, Marisancho Menjón, visitaron ayer uno de esos vestigios, la Cueva del Castillo, un refugio antiaéreo que sirvió de cobijo a los habitantes de Monegrillo durante la contienda y que forma parte de la ruta que impulsa el Ejecutivo aragonés.
La proximidad del pueblo al frente de batalla establecido en la sierra de Alcubierre, y los incesantes movimientos de tropas que tuvieron lugar en ese territorio, convirtieron la localidad en apreciado asentamiento de milicias republicanas y en objetivo para la aviación del ejército sublevado.
Por este motivo, tanto la Cueva del Castillo como la tumba de José Ramón Arana, en el cementerio de la localidad, se han incluido en el expediente iniciado por el Departamento de Educación para declarar como primera ruta de memoria democrática el frente de los Monegros, que es un itinerario por los pueblos y campos situados aun lado y otro de la sierra de Alcubierre.