La Ferieta de Aínsa atrae a 1.500 visitantes pese a las limitaciones
El alcalde destaca el «reencuentro» con los vecinos llegados de toda la comarca
La Ferieta de Aínsa sigue teniendo tirón por más que una pandemia como la del coronavirus ponga restricciones y limitaciones a su celebración. El fin de semana en la localidad del Sobrarbe acababa con la visita de más de 1.500 personas a una cita en la que, con menos puestos y un sol radiante, se concluía con éxito una nueva edición de esta importante celebración en la zona. La clausura en la explanada del castillo puso el broche de oro a un programa de actividades que comenzaba el pasado sábado con la entrega de premios de la Cruz de Sobrarbe y que continuaba ayer en la Villa Medieval para celebrar el encuentro de agroproductores, una tradición que se remonta al siglo XI y que este año se ha disfrutado en versión reducida.
Solo pudieron estar en total dieciocho marcas de artesanía local que pudieron, bajo extrictas medidas de seguridad (recorrido único, gel hidroalcohólico a la entrada y en cada mostrador o aforo limitado, entre otras), vender miel, azafrán, carne, queso, patés o chocolates, entre otras delicias del territorio.
Se prescindió, eso sí, de atractivos como las exposiciones de animales, las subastas de comida y plantas, el concurso de perros truferos o las animaciones infantiles con el fin de evitar aglomeraciones. Pero ni con todas estas precauciones se impidió que se acercasen hasta la feria más de 1.500 personas, siendo en su mayoría vecinos y vecinas de la comarca.
El alcalde Enrique Pueyo puso de relieve en esta edición que la Ferieta que «ha servido para el reencuentro entre vecinos y vecinas de todo el Sobrarbe y estamos muy satisfechos con la acogida, que ha obligado a ampliar el horario». Desde la organización calificaron el evento de exitoso y consideran que la facturación también ha sido muy buena, ya que, al haber pocos puestos, los beneficios se han repartido equilibradamente entre todos los participantes.
Pero el mayor éxito, sin duda, es que en tiempos de una pandemia como la del coronavirus, un año más la Ferieta de Aínsa se haya podido celebrar, ya que el año pasado ni siquiera se atisbaba lo que estaba por llegar con el covid y este la situación epidemiológica en la comunidad generaba muchas dudas. Pero ha sido posible gracias a la colaboración de diversas entidades como el Gobierno de Aragón, la diputación de Huesca (DPH), la comarca, la Cooperativa SCLAS y asociaciones locales.