«El ambiente en ese bar era peligroso para los agentes»
Los policías locales que lo desalojaron defienden a sus compañeros
La Audiencia Provincial de Zaragoza celebró ayer la segunda sesión del juicio contra la dueña del bar, tres clientes y cuatro miembros de la Unidad de Apoyo Operativo (UAPO) de la Policía Local por una trifulca en el interior del establecimiento hostelero en la noche de Reyes del 2019. Al igual que ocurriera en la primera jornada, según el testigo que declaró los hechos ocurrieron de una forma u otra. No obstante, los agentes que intervinieron describieron la actuación como «peligrosa» debido «al ambiente hostil creado por Montserrat M. N., la dueña del bar Corisco Paradise, en la calle Sevilla de la capital aragonesa.
Una de las agentes explicó a los magistrados de la Sección Tercera que en un inicio eran «siete agentes contra 45 clientes». «Entramos para hacer la comprobación de ruido y ella rápidamente dijo que éramos unos racistas, que era el tercer fin de semana que íbamos a lo mismo», recordó.
Esta agente también resaltó que fue la hostelera la que «empleó la barra del bar como un escenario y que intentó provocar al público para que fueron en nuestra contra, lo que obligó a pedir refuerzos». «Ella estaba fuera de sí, incluso cogió a un compañero de la braga, cayendo al suelo y teniendo que quitársela de encima», recalcó.
No fue la única en describir la intervención policial de esta forma, puesto que otros policías municipales llegaron a añadir que el agente herido «llegó a estar agarrado del cuello como si estuviera ahorcado» o que «solo una de las puertas podía abrirse durante el desalojo del bar, lo que, unido a la resistencia activa de varios de los clientes, hizo que todo fuera muy complicado».
Los testigos de la otra parte aseguraron que los violentos eran los agentes, quienes, según afirmaron, accedieron al bar «en actitud chulesca». Con ellos, el juicio quedó visto para sentencia.
La Fiscalía solo acusa a lo clientes para los que pide 1 año de prisión, mientras que el abogado de los policías, José Cabrejas, eleva la solicitud a 3 años de cárcel y la absolución de los agentes. Por contra, la letrada Bella Sánchez pidió 4 años de prisión para los agentes y la exoneración del resto. menos), los homicidios y asesinatos, con cuatro casos, un 33,3% menos que en el 2019, y los delitos graves y menos graves de lesiones y riña tumultuaria, con 395, lo que supone una caída del 28,4 %.
También bajaron los robos con violencia e intimidación un 23,9% (al contabilizarse 786), un 19,6% los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones (1.887), un 13,2% la sustracción de vehículos (210) y un 7,7% los delitos por tráfico de drogas (324).
Por provincias, los delitos bajaron más en la de Zaragoza, un 16,1% hasta 28.763, seguida de la Teruel, un 13,6% (2.272) y la de Huesca, un 4,4% (5.306).
En las capitales de provincia, la criminalidad cayó un 18,2% en Teruel hasta 624 infracciones penales, un 18% en Zaragoza (21.033) y un 0,4 % en Huesca (1.343).
En el conjunto del país, las infracciones penales sumaron el año pasado un total de 1.773.366 hechos, lo que constituye un descenso de 19,4% respecto a los 2.199.475 de 2019.