Aragón pide mil millones al fondo de liquidez autonómica
La mayoría, 980, se dedican a vencimientos por amortizaciones de créditos Otros 35 millones se destinan a devolver las devoluciones del 2008 y 2009
El Consejo de Gobierno de Aragón manifestó ayer su voluntad de adherirse al compartimento del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA) del Fondo de Financiación de las Comunidades Autónomas para acceder a los créditos que atiendan las necesidades de financiación, evaluadas en 1.016 millones de euros para el ejercicio del 2021.
La voluntad de adhesión al FLA conlleva el compromiso de destinar los fondos recibidos a las necesidades de financiación aprobadas por la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos Económicos (Cdgae), así como de cumplir las condiciones financieras establecidas para los recursos que se asignan. De la misma manera, es necesaria la presentación de un plan de ajuste coherente con los objetivos de estabilidad, que asegure el reembolso de las cantidades aportadas por el Gobierno de España.
De los 1.016 millones previstos para refinanciar a lo largo del año, 980 se dedican a pagar vencimientos por amortizaciones; 35,3 a devolver las liquidaciones negativas de la financiación autonómica de los años 2008 y 2009. La cifra total se verá incrementada con la parte que se dedique a financiar parte del déficit público.
El pasado febrero, la comisión adoptó un acuerdo por el que se establece la distribución para el primer trimestre de 2021 que destina a Aragón 673,5 millones de euros. De esa cantidad, 561,7 van a amortizar vencimientos; 8,8 millones de euros a financiar la devolución de las liquidaciones negativas de 2008 y 2009, y 103 a financiar parte del déficit público.
De la misma manera, esta comisión ha hecho pública también la distribución de los fondos para el segundo trimestre que alcanzan los 191,80 millones de euros y que contemplan 78,20 para el tramo destinado a los vencimientos; 8,85 para las liquidaciones negativas y 104,75 para financiar el objetivo de déficit.
Los mecanismos de financiación se enfrentan este año (y el anterior) a situaciones de excepcionalidad a causa de la crisis sanitaria que ha causado la pandemia por covid-19 y que suponen, entre otras cosas, la suspensión de las reglas de estabilidad.
Por otro lado, el Consejo de Gobierno aprobó ayer el Plan Especial de Protección Civil ante el Riesgo de Emergencias de Gasoductos y Oleoductos de Aragón (Procigo), un documento «pionero» a escala nacional,destacó la consejera de Presidencia, Mayte Pérez. El objeto de este plan es establecer el marco orgánico y funcional, las medidas de prevención e información, así como la organización y los procedimientos de actuación y coordinación de los medios y recursos asignados al propio plan para prevenir y, en su caso, mitigar las consecuencias que los accidentes derivados de estas infraestructuras pueden producir en la comunidad. «Los últimos acontecimientos como la borrasca Gloria o la pandemia que seguimos padeciendo hacen que tengamos que prever lo imprevisible y no dejar nada a la improvisación», manifestó Pérez. No en vano, la comunidad acoge 2.200 kilómetros de este tipo de conducciones de gases y líquidos inflamables.
Es el caso de compañías como Enagás Transporte, cuya red, a través de la comunidad suma 580 kilómetros entre los cinco gasoductos principales y siete ramales que atienden diversas zonas de la Comunidad Autónoma. Redexis Gas, por su parte, también cuenta con una importante presencia con 345 kilómetros y la Compañía Logística de Hidrocarburos (CLH) también despliega a través de Aragón una parte importante de trayectos para transportar carburantes y combustibles derivados del petróleo, con cuatro oleoductos de funcionamiento reversible, un oleoducto unidireccional y dos ramales.