Las obras de la torre de Teruel permitirán el acceso al público
La tercera fase de la restauración supone una inversión total de 500.000 euros
Las obras de la tercera fase de rehabilitación de la torre de la catedral de Santa María de Mediavilla deTeruel, que finalizaron el pasado viernes, permitirán las visitas públicas a través del acceso primitivo ubicado en el interior del arco de la fortificación. La restauración de dicha zona ha estado cofinanciada a través del Fite 2018 y ha supuesto una inversión de 469.473,67 euros.
Así lo anunció ayer el consejero de Vertebración del Territorio, Movilidad y Vivienda de la DGA, José Luis Soro, en una visita a la capital turolense, acompañado de la directora general de Vivienda y Rehabilitación, Verónica Villagrasa, el gerente de Suelo y Vivienda de Aragón, Javier Albisu, la alcaldesa de Teruel, Emma Buj, y el anterior obispo de la diócesis, Antonio Gómez Cantero.
«Uno de los momentos más emocionantes del trabajo que hacemos en el departamento es cuando podemos visitar y comprobar in situ de qué sirve nuestro trabajo; el trabajo de muchas personas para recuperar y preservar nuestro patrimonio histórico», explicó el consejero.
Además, Soro aseguró que terminar esta actuación ha sido «muy especial», porque la torre de la Catedral de Santa María de Mediavilla de Teruel es «el epicentro del mudéjar» y porque este estilo arquitectónico es parte de la identidad de los aragoneses y un «símbolo» de convivencia y de respeto en el territorio.
No obstante, el consejero consideró que el motivo más destacado de poder ver terminadas las obras de la tercera fase de restauración de la catedral de Teruel es haber podido recuperar el acceso original y la estructura interior para permitir que sea accesible. «Los trabajos realizados en esta fase se han centrado en la restitución del recorrido por el interior de la torre, recuperando el acceso original al interior desde la Catedral, y que había permanecido tapiado», indicó.
La rehabilitación de la torre de la catedral de Teruel se ha realizado en tres fases que han supuesto una inversión total de 1.549.367 euros. La tercera fase ha contado con un plazo de ejecución de ocho meses y corresponde a una separata del proyecto original, redactada por los arquitectos Joaquín Andrés Rubio y José María Sanz Zaragoza. Soro informó de «la modificación de esta escalera ha permitido devolver la torre a su estado original». Entre los años 1947 y 1953 se mutiló una arista achaflanándola y se cortó una parte de la imposta de piedra para facilitar el desarrollo de la escalera actual.
Los dos arquitectos acompañaron ayer al consejero en su visita a la catedral de Teruel y ambos coincidieron en la importancia de poner en valor la recuperación de acceso primitivo, que anteriormente daba entrada al templo románico, por debajo del arco de la torre mudéjar, así como de las campanas de las horas y los cuartos, que se encontraban inutilizables y que ahora han vuelto a sonar.
También la alcaldesa y el anterior obispo subrayaron la importancia que tiene esta actuación para la ciudad, así como para los creyentes, para los turolenses y para los turistas, a quienes ya se les espera para intentar remontar el sector en este difícil año.