TRÁFICO INTENSO PERO FLUIDO EN LA VUELTA DE LA SEMANA SANTA.
La A-23 fue la vía que más tráfico registró en el día de ayer entre Huesca y Zaragoza No se ha producido ningún accidente grave en todo el puente, lo que resulta poco usual
Las carreteras aragonesas vivieron ayer una jornada de normalidad que solo tuvo tráfico intenso a última hora de la tarde a la entrada de Zaragoza. Este largo puente se ha saldado sin ningún accidente de gravedad en la red viaria de la comunidad.
El puente de la Semana Santa ya ha terminado y, en lo que respecta al tráfico en las carreteras, el balance este año es positivo, puesto que no ha habido accidentes de gravedad desde que comenzó el periodo festivo. En el día de ayer, cuando muchos aragoneses se dispusieron a volver a sus casas después de algunos días fuera, varias vías registraron «una circulación intensa», según informó la Dirección General de Tráfico, aunque no se produjeron retenciones.
La autovía más transitada fue la A-23, entre Huesca y Zaragoza, lo que indica que muchos vecinos de la capital aragonesa han decido pasar estos días de fiesta en las montañas del Pirineo.
Precisamente en esta vía tuvo lugar el incidente más destacable de estos días pasados. Fue el jueves, cuando una colisión múltiple sin heridos ni consecuencias graves provocó una retención kilométrica entre Zaragoza y el puerto de Monrepós.
Así, mientras la operación salida resultó algo más complicada, la de retorno fue menos problemática, lo que resulta llamativo (( (( puesto que en los anteriores fines de semana, desde que se recuperó la movilidad entre provincias, sí que se produjeron algunos accidentes que se cobraron la vida de varias personas en las carreteras aragonesas.
En cuanto a la situación en la capital aragonesa, este fin de semana se ha notado que muchos zaragozanos habían optado por marcharse fuera durante el puente, aunque el retorno ha sido más progresivo y los viajes sin pernocta han sido más numerosos que en años anteriores.