La Guardia Civil informa por email y SMS de las licencias
oculto debajo de un sofá y en una construcción auxiliar. Aparecieron, entre otras armas, una escopeta monotiro, un cañón de ametralladora, unos cañones de escopeta monotiro, un fragmento de una corredora de pistola semiautomática y un cañón de carabina, así como abundante munición, especialmente en el zulo. También se descubrieron tres granadas de mano de fragmentación, pero su tenencia no ha sido imputada a la acusada.
La Guardia Civil informa a partir de ayer a los usuarios de la situación de sus licencias de armas a través de correo electrónico y de SMS, que pasan a ser a partir de ahora los únicos medios para recibir este tipo de comunicaciones. De esta forma el propietario podrá realizar gestiones con las Intervenciones de Armas y Explosivos y recibir información sobre licencias, visados y otras noticias relevantes de un modo más rápido y eficaz. Para ello, se ha creado un nuevo servicio en el Registro Nacional de Armas que se pondrá en marcha a partir de este jueves.
El Juzgado de lo Penal número 1 de Zaragoza considera que la acusada es autora de un delito de tenencia de armas prohibidas, para lo que se apoya en el testimonio de la pareja o expareja del hermano, que atestiguó que gracias a ella Verónica se había enterado de la ubicación exacta de las armas y municiones.
La acusada alegó ser ajena al arsenal, pero la sentencia lo pone en duda y afirma que todo «denota que ella residía en la vivienda de forma regular», por lo que «resulta inverosímil que no se hubiera percatado de la existencia de la escopeta que se hallaba a la vista en una habitación contigua al cuarto de estar, así como de una defensa eléctrica hallada en una estantería del salón».
El juez, por otro lado, descarta la aplicación de una exención de responsabilidad penal por el hecho de que la acusada pudo actuar con la intención de encubrir a su hermano, dado que es posible que ocultara parte del arsenal.